Después de tres días en los que prácticamente no circularon camiones por Extremadura, ayer se dieron los primeros visos de normalidad en el reparto de mercancías por carretera en la región, dado que 480 camiones con alimentos, carburante y medicamentos fueron escoltados. Pese a ello, la normalidad aún no se ha trasladado a los supermercados, donde la escasez de productos frescos, como el pescado, las frutas y hortalizas, y también la carne, se mantiene. No obstante, en el resto de productos, salvo algunas excepciones como la leche y sus derivados, el suministro es normal gracias al acopio de productos que hicieron los días previos a la huelga.
Quienes por fin vieron ayer algo de luz sobre su situación fueron los fruticultores, que pudieron organizar varios convoyes de camiones que fueron escoltados por las fuerzas del orden desde las centrales de almacenamiento hasta los mercados del resto del país e incluso al extranjero, atendiendo así la demanda de los agricultores, quienes habían exigido al Gobierno que pusiera "todos los medios a su alcance" para garantizar el derecho al trabajo de los transportistas que no están secundando el paro.
Esta medida permite a los agricultores aguardar ciertas esperanzas de evitar las pérdidas que supondría tirar sus cosechas por la imposibilidad de llevarlas hasta los mercados, lo que ha empujado a algunos de ellos a transportarla por sus medios. Así, el pasado miércoles la Agrupación de Cooperativas del Valle del Jerte alquiló tres furgonetas para transportar sus cerezas a Madrid, y al regresar, en Avila "fueron atacadas por un piquete, cuyos componentes rompieron los cristales y rajaron las ruedas", según el presidente de la organización, Angel Prieto, informa F. Martín.
Según informó la Delegación del Gobierno, todos los piquetes que ayer retenían a camiones en distintos puntos de la región fueron disueltos. El sector farmacéutico también vivió un día para el alivio con la llegada de dos trailers cargados de medicinas a las principales centrales de distribución tanto en Cáceres como en Badajoz, después de varios días sin recibir pedidos, aunque se constata que en ningún momento ha habido desabastecimiento para la población. Igualmente, la prensa nacional pudo repartirse en toda la región, así como el combustible a las gasolineras, gracias a que los camiones cisterna fueron escoltados por las fuerzas de seguridad.
La situación era ayer muy parecida en todos los hipermercados de la región, en los que predomina la escasez de productos frescos, aunque en el resto de referencias la situación es muy similar a la habitual, gracias al importante acopio de alimentos no perecederos realizado la semana pasada, antes del inicio de la huelga de los transportistas.
Con respecto al abastecimiento en las ciudades, en Cáceres la situación es similar a la de días anteriores y depende del supermercado al que acudan, los consumidores encuentran problemas para hacerse con unos u otros productos. Así por ejemplo, mientras que en el Eroski de la calle Joaquín Aranguren apenas quedaba fruta, en Carrefour no había problemas para comprar este tipo de productos, si bien la pescadería estaba cerrada y las existencias de la carnicería eran escasas. Igualmente, el jefe de almacén de la cadena cacereña Tambo, Pepe Liberal, reconoció ayer que en estos supermercados "comienzan a escasear los productos frescos".
"No tenemos problemas con las reservas de almacén, porque nos aprovisionamos durante las semanas previas al paro, pero sí que empiezan a faltar algunos frescos, como las verduras o la carne", detalló.
En el caso de Mérida, en Carrefour los clientes no tuvieron problemas para cargar sus carros con la mayor parte de los productos, pero el plan se complica a la hora de adquirir pescado, que prácticamente no hay, o frutas y verduras, que cada vez escasean más. Desde ayer ocurre igual con la carne, que comienza a agotarse, aunque se espera que la situación cambie a partir de hoy, dado que se esperan varios camiones con mercancías, por lo que la situación podrá estar "normalizada el viernes por la tarde o el sábado", según Mariano Rodríguez, jefe de tienda.
Por su parte, Mercabadajoz estaba ayer a media mañana bajo mínimos. Las existencias de frutas y hortalizas de los mayoristas estaban prácticamente agotadas y un día más no había entrado pescado. No obstante, según confirmó su director, Ramón Muñoz, la actvidad se desarrolló "con absoluta normalidad" y estaba previsto que entre la tarde de ayer y la madrugada de hoy llegaran varios camiones "escoltados" con mercancía para poder abastecer a los minoristas "el fin de semana y el lunes y martes de la semana próxima".
En cuanto a los supermercados y grandes superficies de la capital pacense han comenzado la legar entre el miércoles por la tarde y ayer camiones con mercancía --salvo pescado, por lo que "la situación se está empezando a normalizar", según apuntaron en Mercadona.
