El centro de interpretación del embalse romano de Proserpina, que previsiblemente estará abierto al público en verano, dispondrá de cuatro zonas expositivas centradas en el abastecimiento y captación del agua, sus usos urbanos, las necesidades domésticas y su utilización en la industria y la agricultura.

Este museo del agua se asentará sobre 200 metros cuadrados de terreno, ha sido diseñado por la empresa E-cultura.net y tiene un presupuesto de 215.630 euros, según explicó ayer el alcalde de Mérida, Pedro Acedo.

Estas áreas confluirán en una pantalla donde proyectarán contenidos audiovisuales sobre el agua. El apartado de abastecimiento y captación del agua reflejará los elementos que se emplean para conseguir que el agua llegue a las ciudades, mientras que en otro espacio se analizará su uso en jardines y fuentes.

Además, otra área se destinará al empleo del agua en las casas y a la utilización de los pozos, y el último espacio explicará el uso del agua fuera de la ciudad.

Cada zona tendrá piezas arquitectónicas, habrá soportes retroiluminados e interactivos, así como creaciones en vidrio, acero inoxidable y sillones que se asemejan a las gotas de agua.