El alcalde de Mérida, Angel Calle, asegura estar "muy satisfecho" con el trabajo de los concejales del equipo de gobierno, pero va a llevar a cabo un "reajuste muy pequeño" en algunas delegaciones. Así, el concejal de Personal, Juan Espino, se hará cargo de todo lo concerniente a política de empleo, que hasta ahora asume el consejero municipal Antonio Rodríguez Ceballos; Saturnino González, también consejero municipal, se hará cargo de todo lo relativo al fútbol, asunto integrado hasta el momento en la Delegación de Deportes que maneja Fernanda Avila; Luis Valiente añade a sus competencias la de Participación Ciudadana (la tenía el edil Julio César Fuster) y el mantenimiento de las instalaciones deportivas; mientras que Elisa Muñoz se ocupará de Sanidad (tarea encomendada hasta el momento a Marisa Tena); y Manuel Jiménez añadirá a sus carteras todo lo relacionado con la recogida de animales, cuestión de la que se ha ocupado Carmen Yáñez.

Calle insistió en que no son grandes cambios y que no afectan a los concejales, que seguirán porque, tal y como explicó, tienen el acta de concejal y son ellos los que tendrían que renunciar a la misma. Son modificaciones para mejorar algunas cuestiones puntuales, ya que, dijo, en lo relativo al trabajo conjunto "es difícil haber hecho más en estos dos años", porque es "una época terrible, la más dura de los últimos cincuenta años, con un recorte de ingresos, pero saldremos adelante".

Al margen de estos cambios ahora necesarios, el alcalde destacó algunos de los logros que, a su juicio, han servido para "convertir a Mérida en una ciudad de referencia en el ámbito de la solidaridad, la cultura y la música", además de haber logrado infraestructuras importantes.

HABIDO Y POR HABER En este sentido, recordó el próximo parque industrial Expacio Mérida , en el que se crearán 210 empresas, 5.300 puestos de trabajo y se invertirán 72 millones de euros; el paso y la parada del AVE en la ciudad, el desarrollo del Plan Urban "que va a cambiar la margen izquierda de la ciudad" con los 11,4 millones de euros de inversión; las mejoras palpables tras el verano en Proserpina y su entorno con los cinco millones de los fondos ICO; la construcción de 196 viviendas a un precio de 72.000 euros promovidas por el ayuntamiento; y las distintas obras para solucionar los problemas de suministro de agua en determinadas zonas y de canalización y alcantarillado en otras barriadas.

Tras reiterar el impulso al turismo con la feria de muestras y la futura Escuela Superior de Hostelería, Calle destacó otras mejoras "no tangibles", en referencia a que "Mérida ha ganado en normalidad, estabilidad y tranquilidad política y democrática y ahora nadie se siente insultado por sus ideas".

De cara al futuro, señaló que hay "un potencial inmenso" para la ciudad, pudiendo ser subsede olímpica en el año 2016 caso de que Madrid sea la ciudad elegida para los juegos olímpicos de ese año, y que Mérida contará en dos años con cinco centros de día para mayores y con el doble de guarderías públicas.