El déficit de anestesistas mantiene al 40% la actividad quirúrgica programada en el Área de Salud de Mérida, que ha perdido en las últimas semanas a prácticamente la mitad de la plantilla. De los 17 facultativos que componen la unidad solo «ocho o nueve» están trabajando en estos momentos, lo que ha limitado a unas cuatro el número de operaciones diarias programadas para poder seguir atendiendo las urgencias, toda la actividad tumoral y la cirugía mayor ambulatoria, «que no se pueden aplazar de ninguna forma».
A ello hay que sumar además las consultas externas, el servicio de reanimación y las guardias. «Es una situación de plena fatiga para el personal», explica Álvaro Mondragón, uno de los anestesiólogos que actualmente trabaja en el Área de Salud de Mérida. Mondragón reconoce que la situación es fruto de la falta de profesionales que afecta no solo a Extremadura, sino a toda España, y asegura que la Gerencia del Área de Salud de Mérida busca facultativos sin éxito.
Según explica, de los 17 especialistas, siete han obtenido una plaza fuera de Mérida mediante oposición y otros dos están de baja por maternidad. Pero a día de hoy solo se ha conseguido reemplazo para cuatro de ellos, por lo que la unidad está bajo mínimos.
Esto, unido a las vacaciones estivales, ha hecho que en los momentos más críticos del verano se haya llegado solo a atender un quirófano diario y las urgencias. Sin embargo, según Mondragón, la situación se está poco a poco normalizando y confía en que a finales de septiembre se haya logrado recuperar el 80% de actividad. En condiciones normales se atiende una media de 10 operaciones programadas y ahora están en unas cuatro, al 40%.
El más perjudicado por la situación ha sido el Hospital Tierra de Barros de Almendralejo, que ha visto canceladas un gran número de operaciones durante el verano al atender la cirugía menor, que puede aplazarse con más facilidad al no ser urgente.
