Uno de los mayores retos que cualquier persona tiene que tomar en su vida, bien de forma individual o en pareja, es la compra de su vivienda. Esto es debido, principalmente, a la inversión que supone, por lo que tenemos que estar bien seguros para dar el paso.

El precio y la fórmula de financiación, aunque no es el único condicionante, se le suele prestar una especial relevancia. Pero cada vez en menor medida, puesto que aspectos como la ubicación de la vivienda, si es a estrenar o no, la superficie y su distribución, la calidad de los materiales empleados, así como el tipo de instalaciones, son elementos clave y de mayor peso en la decisión final.

Y esto es así, porque cada vez somos más conscientes de que este año es el mejor momento para comprar una vivienda, ya sea, como primera vivienda, como reposición de la que tenemos actualmente o como inversión a medio y largo plazo.

A día de hoy, el crédito hipotecario está en su mejor momento, con tipos muy bajos y buenas condiciones de concesión, registrando incrementos de firmas y en clara proyección al alza. A esto se añade que el precio de compra se encuentra en las cotas más bajas derivadas de la inactividad de años y la regularización del mercado y, después de varios trimestres en alza, las previsiones para este año 2017 apuntan a un incremento de como mínimo un 3%.

Con estos indicativos tan favorables, es un buen momento para comprar. Sin duda, pero, ¿cualquier vivienda? La respuesta es no.

Se deben cumplir tres aspectos muy importantes y que coinciden con los factores que cada vez tenemos más en cuenta a la hora de buscar nuestro futuro hogar. Para asegurarnos que la compra de nuestra futura vivienda es una compra inteligente, debe cumplirse con que tiene que ser de nueva construcción, de buena calidad y situadas en zonas consolidadas.

Lo primero: La ubicación de la vivienda

No hay duda que debemos buscar en zonas perfectamente consolidadas, pero debemos huir de zonas excesivamente céntricas, pues están especialmente enfocadas al turismo, comercio y ocio que proporcionan una alta concentración de actividades ruidosas y molestas. Además, si limitamos nuestra búsqueda en esta zona, los resultados se reducirán a manzanas edificatorias con calles estrechas, con accesos incómodos, con una alta concentración de tráfico y graves problemas de aparcamiento. Y todo esto, sin tener en cuenta el estado de la vivienda que encontraremos que en gran medida serán viviendas de segunda mano que necesitarán reformas considerables.

En todas las ciudades, podemos encontrar zonas urbanas muy consolidadas y bien estructuradas, que además, cumplen con una planificación del territorio más ordenada y con muchas más posibilidades a futuro. Son zonas con una actividad principalmente residencial que, proporcionan a cualquier perfil familiar, tenga hijos o no, todas las comodidades junto a un mayor y mejor número de servicios extras. Cercanía a colegios, escuelas infantiles, servicios sanitarios, zonas comerciales, tiendas o servicios de alimentación y por supuesto, grandes espacios destinados a amplias avenidas que cuentan además con zonas verdes para actividades al aire libre y de ocio con espacios destinado a juegos infantiles.

Lo segundo: Tipología, distribución y tamaño de la vivienda

Ya comentamos que a la hora de comprar una vivienda para formar nuestro hogar, sin duda nos deberíamos decantar por una vivienda a estrenar. Y es que si echamos un vistazo al mercado de segunda mano, nos encontraríamos con un parque de viviendas con diseños anticuados, mala distribución y aprovechamiento de los espacios. A esto se añade que las dependencias cuentan con poca iluminación y ventilación natural muy limitada, sin contar con las tan necesarias instalaciones de renovación de aire exigida por la normativa actual.

Pero la peor parte suelen presentarlas todas las instalaciones, a veces insuficientes y que en el caso de existir, cuentan con un mal diseño y con serios problemas de funcionamiento y rendimiento derivado del uso, el paso del tiempo y un inadecuado mantenimiento.

En definitiva, casas que, en la mayoría de los casos, necesitan grandes reformas y que si está a nuestro alcance realizarlas, dado su elevado coste, son un ligero lavado de cara. A pesar del esfuerzo económico que pudiéramos hacer, la recompensa sería mínima, puesto que nuestra vivienda seguirá perteneciendo a un edificio muy antiguo que en el mejor de los casos contarán con una clasificación energética del tipo G o F.

Actualmente, se ha evolucionado mucho en las nuevas construcciones y en todos los elementos materiales que la componen, cumpliendo con normativas más exigentes y por supuesto, con justificaciones de su cumplimiento, certificados de garantía y pruebas de puesta en marcha. De aquí la importancia del siguiente punto.

Lo tercero: Calidad de los Materiales y su ejecución.

La vivienda de segunda mano es una vivienda usada, con más o menos tiempo de antigüedad y que en el caso que su anterior propietario no haya modificado o actualizado, el estado de sus elementos y materiales habrán sufrido un serio desgaste. Este hecho se agravará más en el caso de las instalaciones, las que necesitarán un mayor esfuerzo económico en su mantenimiento, semejante a lo que ocurre con la compra de un coche antiguo.

Y es que, la calidad de los materiales no solo es lo que se ve. Tan importante o más es lo que no vemos. Nos referimos a las instalaciones, sus conducciones que van empotradas en las paredes o por los falsos techos, la existencia o no de aislamientos térmicos y acústicos, etc.

No debemos olvidar que, lamentablemente, el 92,8% de las viviendas existentes no están construidas bajo las exigencias actuales de eficiencia energética, por lo que olvidémonos de los ahorros en consumos de instalaciones. Contar con una casa bien aislada es tanto para protegernos del ruido, de la entrada de agua o humedades y de la pérdida o ganancia de calor en invierno o verano respectivamente.

Pero, también es cierto, que todo esto podemos corregirlo. Cierto, pero ¿a qué precio? ¿Y en qué magnitud?

En cualquier caso, los elementos constructivos, las técnicas de ejecución, los materiales, las exigencias normativas y garantías han evolucionado considerablemente y a estas alturas, todos tenemos claros que cuando buscamos una vivienda no solo es un techo para dormir. Nuestra futura casa es algo más, es nuestro hogar. Un lugar para crecer y compartir con la familia, un espacio para descansar después de largas jornadas de trabajo, nuestro rincón para relajarnos, leer, cocinar, educar a nuestros hijos y cuidar de ellos y, por supuesto que nos cuiden. Es decir, un techo que nos proporciona calidad de vida.

Ahora bien, el parque de viviendas de nueva construcción es muy escaso. El ritmo de obra nueva aún no es demasiado notable. Pero si realizamos una búsqueda, en Cáceres tenemos un ejemplo claro de la mano de la promotora extremeña Promociones Eficientes Montesol, que cumplen con todos y cada uno de los aspectos aquí indicados.

Viviendas de obra nueva, con excelentes calidades y ubicadas en una zona perfectamente consolidada.

Un edificio de 36 viviendas que está ubicado en Montesol II de Cáceres. Una zona urbana consolidada, con la existencia de todos y cada unos de los servicios que cualquier estructura familiar pueda necesitar. Todo lo necesario para vivir con comodidad. Colegios, centros comerciales, zonas deportivas, carril bici, grandes avenidas, zonas verdes, restaurantes, servicios y sobre todo una excelente conexión con el resto de la ciudad a través de la Ronda Norte de Cáceres y el resto de servicios de transporte público.

Además el Edificio MONTESOL II en su conjunto tiene un diseño moderno, atractivo e innovador. Cualquier persona lo notará, sabrá que está pasando por un lugar exclusivo, con una cuidada imagen y estética, reflejo de la calidad de los materiales de su fachada.

Esta fachada, que representa la piel del edificio, está perfectamente orientada y resuelta con un cuidado extremo en los elementos de aislamientos térmicos, acústicos e impermeabilizaciones, proporcionando un conjunto de alta eficiencia energética y perfecta durabilidad y estética, lo que disminuye considerablemente el mantenimiento posterior y proporcionando un alto grado de exclusividad y longevidad.

Esta promoción nace con la idea de poder adecuarse a las condiciones vitales de los distintos tipos de habitantes que forman las nuevas y variadas estructuras familiares, cada una de ellas con sus propios hábitos y adaptarse a sus criterios establecidos, tanto en el momento de la compra como en el futuro.

El resultado, 36 viviendas diseñadas bajo tendencias actuales, de forma moderna e innovadora, contando con espacios cómodos que son un claro ejemplo de un concepto totalmente distinto a lo que existe en Cáceres. Pisos en una planta, apartamentos, dúplex (o de doble altura) y áticos son las tipologías que encontraremos en esta promoción, contando además con 2, 3 o 4 dormitorios, además de 2 o más baños y amplias terrazas, que en muchos casos alcanzan los 100 metros cuadrados de superficie de uso y disfrute íntimo y personal.

Todos los espacios exteriores están conectados con los espacios colindantes mediante amplias cristaleras que aportan la necesaria ventilación e iluminación, sin olvidar su conexión con el exterior, aportando al conjunto de la vivienda, vistas a la calle principal y hacia la famosa zona verde del Paseo Alto de Cáceres.

En el interior de cada vivienda, como estancias principales que respetan la relevancia e importancia que para nuestro hogar familiar representan, se encuentran el salón-comedor, la cocina, el dormitorio principal y el resto de dormitorios. Cada estancia, que ha sido distribuida en espacios perfectamente aprovechados con especial cuidado en la amplitud y luminosidad, cuenta con innumerables posibilidades en su diseño, distribución y amueblamiento, al gusto particular de su propietario. Además, cualquier miembro de la familia, o cualquier invitado de la casa, podrá disfrutar del ocio y diversión gracias a las las conexiones digitales y audiovisuales, alrededor de las cuales organizamos gran parte de nuestras vidas.

En esta distribución hay lugar también para los espacios destinados al aseo personal, en dos formatos: Aseo o cuarto de baño completo. En cualquier caso, cada vivienda cuenta con 2 o más unidades y, podrán destinarse a un uso personal, íntimo e independiente o para compartir incluso con visitas ocasionales de algún familiar y/o amigo.

Por otro lado, la independencia acústica de nuestro hogar es algo que afecta a nuestra convivencia y a nuestro bienestar, por lo que teniendo en cuenta esta premisa, se ha tenido especial cuidado y esmero en el diseño técnico de los aislantes acústicos de fachada y forjados entre plantas, las ventanas y sus vidrios junto a una reducida conexión entre viviendas contiguas y una tabiquería especial en el caso de que se comparta con otros propietarios.

Al igual que con los aislantes acústicos, los aislantes térmicos que componen la fachada, la carpintería exterior de fachada en PVC y vidrios dobles con cámara de aire junto junto a un sistema de disminución de consumos eléctricos en la producción de agua caliente sanitaria (aerotermia) del edificio... y el resto de instalaciones, garantizan la eficiencia energética del Edificio MONTESOL II. Sin duda el ahorro energético del que disfrutaremos toda la vida nos permitirá invertirlo en otras cosas más útiles, incluido el ocio y, no exclusivamente en el recibo de la energía.