Como un trabajo de desnudo humano. Así definió ayer parafraseando al título de su obra la autora de 'Hombres desnudos', Alicia Giménez Bartlett. La escritora de Almansa, galardonada con el premio Planeta, uno de los más altos reconocimientos en el mundo de la literatura contemporánea nacional, se subió ayer a las tablas de la carpa del Quiosco de la Música para presentar su trabajo a los cacereños. "Me interesaba mucho desnudar al ser humano", apunto la escritora al inicio de la presentación dirigida por José Ramón Alonso de la Torre.

En su discurso ante un parlamento sin una silla libre, incidió en que la obra "no es un ajuste de cuentas con los hombres", hizo mención a la balanza sobre de la sociedad en cuanto a la lucha de sexos o la lucha de clases y relató que el discurso del relato está asentado sobre cuatro personajes y aborda el tema de la prostitución masculina. Sobre las conclusiones que puede extraer el lector con su obra, la dama negra de la literatura apostilló que prefiere que cada uno capte sus propias conclusiones.

La presencia de los lectores cacereños también fue garante en la presentación anterior. A primera hora de la tarde fue Inés Pedrosa la que subió al escenario junto a Raquel Gafanha, del instituto Camoes, para presentar dos obras 'Desnorte', un trabajo que recoge una decena de relatos independientes, y 'Desamparo', una novela sobre los emigrantes e inmigrantes.

A última hora de la mañana, autoridades de la Unidad de Programas Educativos y de la Junta presentaron el número 14 de la Revista Cáparra, una publicación sobre las experiencias educativas de los centros de profesores y recursos de Cáceres. Una de las curiosidades con las que cuenta este último número, según detallaron ayer en la presentación y recoge la organización de la feria del libro, es una entrevista a uno de los máximos exponentes de la pedagogía Waldorf, Tamara Chubarovsky.