Es la tormenta perfecta en el abastecimiento de agua a la ciudad: El Guadiloba con menos de la mitad de su capacidad y perdiendo volumen mes a mes y la cota de Alcántara cada vez más cerca de la 192, por debajo de la misma no habría suministro de agua desde el trasvase del Almonte, que saca el agua de la cola del embalse de Alcántara y que es de donde se abastece la ciudad.

No es que Cáceres se vaya a quedar sin agua mañana, con la capacidad actual del Guadiloba habría para algo menos de doce meses, pero se está terminando el año hidrológico con un escenario complicado. La prueba es que si Alcántara y Guadiloba siguen cayendo al mismo ritmo de las últimas semanas, Cáceres entraría en octubre no ya en situación de prealerta de sequía, en la que podría estar en los próximos días si no frena el descenso de Alcántara, sino directamente en alerta, según los umbrales de escasez que marca el plan especial de sequía de la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT) para Cáceres.

Lo más llamativo es la caída del nivel del embalse de Alcántara. Su cota ha descendido casi cinco metros en las últimas dos semanas, ha pasado de la 199,5 del 28 de agosto a la 194,9 del pasado 11 de septiembre, además en el último mes se han desembalsado 309 hectómetros cúbicos, cantidad que es 1.640 veces la capacidad del Guadiloba. Bajar de la cota 194 supone que dependiendo de la capacidad del Guadiloba se entra en situación de prealerta o alerta de sequía, según los umbrales de la Confederación del Tajo en su plan especial.

Cáceres se abastece desde 1971 del embalse del Guadiloba, pero su escasa capacidad y aportaciones hacen necesario desde 1992 trasvasar agua desde el embalse de Alcántara, en la toma que está en la cuenca del Almonte. El problema, que se muestra en casos como el actual, es que por debajo de la cota 194 se entra en una situación complicada y por debajo de la 192 ya no se podría trasvasar. Las bombas que impulsan el agua están en la 191. Canal de Isabel II acaba de adjudicar las obras para reforzar el trasvase y que se pueda traer más agua, pero si la cota del embalse de Alcántara baja de la 192, esta mejora no sirve.

Además si esta cota baja de la 194 se entraría en prealerta de sequía por el actual nivel del Guadiloba. Se está en prealerta en el mes de septiembre cuando Alcántara baja de la cota 194 y el embalse cacereño tiene un volumen inferior a 11,5 hectómetros cúbicos. El pasado miércoles tenía 8,57. Y se llegaría a una situación de alerta si el Guadiloba baja de 7,76 hectómetros cúbicos en septiembre -para octubre se fija este umbral en 7,24-.

POZOS DEL CALERIZO / Para cada situación, la CHT marca medidas en su plan especial de sequía. Para el umbral de prealerta se establece que la Confederación del Tajo tendrá que hacer un seguimiento del estado de los embalses de Alcántara y Guadiloba (procediendo a analizar la pluviometría del año en curso y las entradas a los embalses) y comunicar a Red Eléctrica de España las medidas que se vayan adoptando. Para el nivel de alerta se fija, además de las anteriores, que la CHT comunicará a Iberdrola, que tiene la concesión del aprovechamiento del embalse de Alcántara, que deberá tener en cuenta la situación de sequía y sus efectos en su programa de turbinado para la producción de energía, además por parte del ayuntamiento, como titular de la infraestructura, se tendrán que aportar recursos adicionales, especialmente desde los pozos que extraen agua del acuífero del Calerizo.

En el plan se menciona el trasvase desde Portaje para aumentar la garantía de suministro, pero la obra, pese a que se adjudicó en 2007, no se ha terminado ni hay fecha para su finalización.