El ayuntamiento sacará una convocatoria de ayudas directas a autónomos y pymes. La propuesta pasó ayer por el grupo de trabajo para asuntos económicos que está formado por concejales de los distintos partidos representados en la corporación local. En principio es un millón de euros. La propuesta del gobierno contó con el apoyo del resto de grupos y concejales no adscritos, que entre sus iniciativas también llevaban la concesión de estas ayudas.

Este millón de euros «es una cantidad que habrá que aumentar siempre que sea necesario y el presupuesto lo permita», aseguró este jueves la concejala de Economía, María Ángeles Costa, al término de la reunión del grupo de trabajo. Su concesión se anunció hace una semana y ahora se ratifica. La novedad, según ha expresado Costa, es que se ampliarán los gastos subvencionables y que su tramitación la llevará la oficina del Punto de Activación Empresarial que está en el edificio Embarcadero.

Las condiciones generales de estas ayudas, que ahora se tendrán que concretar en la convocatoria, están en el documento que el gobierno entregó a los grupos de la oposición con las medidas del plan de impulso para ayudar a los sectores más afectados por la crisis del coronavirus. Costa ha confiado este jueves en que en los próximos días pueda cerrarse el trámite administrativo para empezar a darlas.

Ese millón se podría incrementar si el Gobierno amplía los usos que se pueden dar al superávit de 2019, que finalmente es de 4,8 millones de euros. El Gobierno permite ahora destinar el 20% a gastos de política social. El resto, si no se amplían los usos permitidos en la ley de estabilidad presupuestaria, se podría gastar en incrementar el gasto en inversiones financieramente sostenibles, opción ahora permitida. Desde el gobierno municipal se espera de Madrid una ampliación de los usos del superávit, permitiría dotar de más crédito a gastos para medidas sociales y de ayuda al sector empresarial y al turismo.

Una de las condiciones de partida para recibir esta ayuda es que se acredite que la facturación se ha reducido un 75% con respecto a la de febrero. En la reunión de ayer la concejala del PP María Guardiola planteó que esa comparativa no se limite a los resultados de febrero. También propuso que haya una mayor flexibilización en la regulación de las terrazas para adaptarse a la nueva situación cuando se recupere la actividad y que se devuelva a los hosteleros el importe de la tasa íntegra.

En cuanto al comercio, los populares han solicitado medidas que faciliten su digitalización y ayudas económicas directas para el sector. En medidas tributarias, desde el PP se ha insistido en la devolución de los importes ya pagados, así como la ampliación hasta diciembre del periodo voluntario de pago de todos los tributos devengados y la suspensión del cobro de tributos.

El concejal de Unidas Podemos Raúl Martín planteó que esas ayudas lleguen al mayor número posible de pequeñas empresas y que se evite que se concentren en pocos beneficiarios. También se ha planteado desde Unidas Podemos los bonos de consumo que vayan dirigidos a comercios y empresas locales y además una flexibilización en la ordenanza de terrazas para su adaptación a la nueva situación que se dará cuando se reanude la actividad empresarial.

El concejal de Ciudadanos Antonio Ibarra abogó por la ampliación de este paquete inicial de ayudas a otros sectores, como la hostelería y el comercio, que se tendrán que readaptar a nuevas condiciones cuando puedan reabrir sus negocios. Ibarra defendió la necesidad de que se pueda destinar un mayor importe del superávit a estas ayudas al sector empresarial de la ciudad.

Cs ha propuesto suspender de forma inmediata el cobro de impuestos y tasas municipales durante todo el periodo del estado de alarma, explicó Ibarra, “y una vez derogado el estado de alarma, fijar una moratoria de seis a doce meses en el pago de tasas e impuestos de ámbito municipal a pymes, autónomos, sociedades y particulares de sectores afectados como son la hostelería, comercio, turismo y construcción; y a cualquier otro colectivo afectado directamente y en situación de riesgo”.

Esa mayor aportación al plan de ayudas también se pidió por el concejal no adscrito Francisco Alcántara, que sugirió que las subvenciones estén en torno a los 5.000 euros por solicitante, ahora el tope está cuantificado en 2.999, y propuso que entre los gastos subvencionables se incluya la adquisición de mercancías.

Alcántara echó en falta que no haya un presupuesto más ambicioso, "es un tema más de voluntad que de incapacidad legal y es algo que no acabo de entender, se tenía que haber llegado a un presupuesto mínimo de seis millones de euros -del plan de impulso de economía, cultura, social y turismo- y nos vamos a quedar en la mitad". Destacó el consenso que hay para la suspensión de tasas e impuestos municipales y para las ayudas a las empresas, "el modelo de pago anticipado y que después se justifiquen los gastos me gusta porque inyecta liquidez a las empresas, que es lo fundamental".

Disponer de mayor parte del superávit y de más inversión para la ayuda directa al sector empresarial también fue una de las reivindicaciones del concejal no adscrito Teófilo Amores, que, al igual que el resto de representantes de los grupos políticos, abogó por las suspensiones del cobro de tributos y devoluciones cuando no se ha ejercitado la actividad o el servicio de la tasa.

Amores defendió incrementar el presupuesto de inversiones "y acometer todas las modificaciones presupuestarias que fueran precisas para destinar las mayores cantidades posibles al plan de choque" con medidas sociales y de ayuda a sectores afectados por la crisis del coronavirus. Para disponer de más recursos para este plan se mostró partidario de ir a operaciones de crédito "sin agotar el nivel razonable de endeudamiento" para que quede un margen de maniobra de cara a 2021 y 2022.

Costa confirmó ayer que se negocia con el organismo de Recaudación de la diputación que el plazo para el pago del IBI se pueda ampliar hasta diciembre. El IBI es el principal impuesto del ayuntamiento y el que más afecta a los contribuyentes. Desde el gobierno local se recordó ayer que también se ha suspendido el cobro de determinados tributos y que se harán devoluciones de lo cobrado por el tiempo que no se ha podido ejercer la actividad, como es el caso de las terrazas.

Costa insistió en que no solo se trabaja en medidas "inmediatas como ayudas sociales o económicas, sino también el esfuerzo que el ayuntamiento hace con el mantenimiento de todas las inversiones que se van a llevar a cabo en la ciudad que son más de 5 millones para poder revitalizar sectores tan importantes en generación de empleo y riqueza como la construcción”.