El Centro de Formación y Tropa (Cefot) Número 1 recibirá hoy a una nueva remesa de soldados con la llegada de cerca de 1.500 alumnos. Se trata de los militares que formarán parte del segundo ciclo de formación que pasa por la base de Santa Ana este año y es el más numerosos de los últimos tiempos (el último ciclo que se marchó a finales de octubre estaba formado por 1.370 alumnos).

Los soldados comenzarán a llegar a lo largo del día de hoy a la capital cacereña donde permanecerán durante algo más de cuatro meses y medio, tiempo que dura el periodo de formación en el que aprenden nociones generales del mundo militar (programa correspondiente a la fase de formación militar). Esta, que dura algo más de dos meses, culmina con la jura de bandera, que se desarrollará durante el mes de enero y se prevé que sea una de las más multitudinarias de los últimos años por el elevado número de alumnos.

La segunda parte de la formación es la específica, en la que se les enseña el manejo de armas o las relacionadas con infantería ligera, infantería mecanizada y caballería, las especialidades que se imparten en el Cefot. Dura casi dos meses (siete semanas). En este periodo habrán de sacarse el carnet de conducir tipo B (los que no lo tengan) o tipo C (los que estén en posesión del B). Después estarán preparados para marcharse a los destinos que les sean encomendados. Los últimos soldados que salieron del Cefot partirán a Afganistán, Mali, Líbano o Irak.

DURANTE TODO EL DÍA / Podrán llegar hasta bien entrada la tarde y una de las primeras pruebas que pasarán será la de ponerse en manos del peluquero para cortarles el pelo. Al día siguiente el centro les proveerá de todo lo necesario para estar uniformados durante todo el día. Además, se les tomarán medidas para elaborar el traje con el que más adelante realizarán su primera jura de bandera como soldados.

En la página web del Centro de Formación de Tropa (Cefot) se informa de que en este espacio se «les enseña no sólo a ser militares y a ser excelentes soldados» sino también valores como «respeto, disciplina, afán de superación, compañerismo, pasión por lo que hacen y orgullo por un trabajo bien hecho, en definitiva, se les enseña a ser esas personas que van a sus unidades y al extranjero y nos hacen sentir orgullosos de ser militares, de ser españoles». Y se les ofrece información sobre Cáceres, para que conozcan que llegan a una ciudad declarada Patrimonio de la Humanidad.