La Diputación de Cáceres ha reducido en un 25 por ciento los accidentes laborales en la institución en 2017 con respecto al año anterior. Así lo ha señalado el diputado de Personal, Miguel Salazar, tras darse a conocer la memoria de 2017 del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales de la diputación cacereña.

Para Salazar, esta memoria «refleja el trabajo profesional de todos los componentes del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales y la mayoría de edad de la prevención de riesgos laborales en la institución, quedando de manifiesto los avances y progresos conseguidos y que, gracias a la política preventiva de la Diputación de Cáceres, ha conseguido reducir en un 25% los accidentes laborales en el 2017».

En la memoria del año pasado, se refleja también las principales líneas de trabajo del Comité de Seguridad y Salud Laboral, basadas en cinco aspectos, la integración de la prevención en el sistema de gestión de la diputación provincial, la formación básica, la formación específica, estudios de adaptación de puestos de trabajo y la vigilancia de la salud.

En lo que respecta a la integración de la prevención en el sistema de gestión de la diputación, cabe destacar que todos los servicios disponen de un responsable o colaborador de prevención. Además, se ha comenzado a designar a responsables y colaboradores directos en cada centro de trabajo, para aumentar así la estructura preventiva de la diputación.

En cuanto a la formación de los nuevos empleados de la diputación, todos los trabajadores, ya sean funcionarios definitivos o interinos, reciben un curso básico de prevención de riesgos laborales y una explicación de la estructura preventiva de la institución y de cómo emplearla.

Uno de los aspectos más destacados del trabajo de la diputación en materia de prevención de riesgos laborales ha sido la adquisición de 350 sillas ergonómicas adaptadas a la normativa vigente para puestos de trabajo con pantallas de visualización de datos, conocidos como PVD. Este tipo de empleos tienen unas necesidades especiales, como había detectado la institución tras las evaluaciones ergonómicas de los puestos, por lo que se hizo presciso cambiar el tipo de sillas de los trabajadores. En cuanto a la denominada ‘vigilancia de la salud’, es decir, los reconocimientos médicos periódicos, más del 75 por ciento de la plantilla de la diputación se ha sometido a ellos.

En la memoria, se recogen además, entre otros aspectos, la ejecución de programas innovadores y experimentales en prevención de riesgos cardiovasculares, obesidad y tabaquismo, dentro de las campañas y actividades complementarias para la mejora y promoción de la salud. En este programa concreto han participado más de 600 empleados de la institución.

Una de las apuestas más impotantes realizadas por la Diputación de Cáceres para este 2018 es la adquisición de ocho desfibriladores en los centros de trabajo, que se sumarán a los seis que tiene instalados actualmente en el Complejo Santa María de Plasencia, Complejo San Francisco de Cáceres, Oficinas Centrales de Recaudación, Palacio Provincial, Complejo Deportivo Provincial y Parque móvil y talleres. Los nuevos desfibriladores previstos para el presente ejercicio irán ubicados en el palacio Carvajal, Escuela de Bellas Artes, edificio Julián Murillo, Pintores 10, Finca Haza, Museo Pedrilla, Recaudación Zona Cáceres y Recaudación Plasencia.

Para poder hacer uso de estos desfibriladores, la diputación ha formado a 29 trabajadores y tiene previsto formar, al menos, a 24 más.

Así mismo, la institución ha adquirido desfibriladores para los municipios de la provincia cacereña de menos de 20.000 habitantes, en total, 227 aparatos, con un coste total de 250 mil euros. Por otro lado, y con el doble objetivo de proteger a los trabajadores y ofrecer un mejor servicio a la ciudadanía, el Servicio Provincial de Extinción de Incendios, Sepei, ha adquirido un desfibrilador para cada parque y en estos momentos se está en proceso de formación de los trabajadores.

Finalmente, desde el área de Personal se ha apoyado la propuesta del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales para que con el Bonus obtenido por la baja siniestralidad de años anteriores, se adquirieran un tonómetro para realizar una campaña de detección precoz de la tensión ocular y un desintómetro para la detección precoz de osteoporosis. Ambas campañas se llevarán a cabo en el 2018 y ya hay más de 200 solicitudes de empleados públicos de la diputación para participar en las mismas.