El propietario de la casa que se desplomó el pasado miércoles en la plaza de Italia, Emilio Jaraíz, detectó el día anterior algunas grietas que le causaron cierta extrañeza, derivadas, al parecer, del derrumbe de una vivienda anexa. El dueño avisó a los técnicos municipales y fue desalojado ese mismo día por una resolución de la alcaldía. El lateral de la casa, precintada y vallada, se vino abajo 24 horas después.