Le parece lamentable lo que está sucediendo en el Ayuntamiento de Badajoz, destaca sus buenas relaciones con el alcalde de Cáceres y recuerda que fue a la fiesta del Orgullo en Cáceres en razón de su cargo de concejal. Teófilo Amores es portavoz municipal de Vox, y ni tiene pelos en la lengua, ni calla, ni teme que le echen después de esta entrevista.

-A usted no le pega ser de Vox...

-Me afilié a Vox cuando Pedro Sánchez llegó a la presidencia del Gobierno; si hubiera llegado Javier Fernández, el que fue presidente de Asturias, un hombre sensato, tranquilo, razonable, fijo que yo seguiría disfrutando de mi vida como jubilado. Digo Javier Fernández como podría haber dicho muchos otros militantes socialistas que son mucho más sensatos que quien ostenta la presidencia del gobierno en unas bien ganadas elecciones, no cabe ninguna duda. Me parece que Sánchez le estaba haciendo daño a España y me parecía que mi obligación era hacer lo que estuviera en mi mano por luchar contra ese daño.

-Pero usted estuvo en el PSOE...

-Me afilié al PSOE a finales del 75, entonces era doble afiliación obligatoria, te hicieras del PSOE o te hicieras de UGT, tenías que afiliarte a ambos, de modo que también me hice de UGT. Estando dentro del partido, me dijeron que me hiciera cargo de la secretaría de Organización de UGT porque tenía menos estructura; la estuve llevando hasta el 78. Era la época en la que todavía no eran legales los sindicatos y vivimos la legalización con una enorme alegría.

-¿Cómo explica su viraje del PSOE a Vox?

-Ahí ha habido 40 años de por medio. Estuve en el PSOE hasta el 82 y me hizo irme del partido cuando vi que empezó a meterse cantidad de gente buscando liberarse y buscando puestos, eso no era el PSOE que yo quería, no era mi PSOE, por el que yo había luchado, yo allí no pintaba nada. Y me fui. Y he estado apartado de la política hasta ahora.

¿Habla del PSOE, pero lo que ha pasado en Badajoz con su partido no le parece una vergüenza?

-Sí, me parece mal y que no es de recibo. Creo que una persona que se ha presentado al escrutinio público en unas elecciones y el pueblo le ha dicho que no lo quiere, debe mantenerse al margen, porque el pueblo ha sido muy claro. Ha habido dos personas (se refiere a Juan Antonio Morales y Antonio Pozo) a las que el pueblo ha dicho que no las quiere. Le hacen un flaco favor a mi partido, porque es mi partido, no es el partido de Abascal, es el partido de los que militamos en ese partido. Estos dos han buscado meterse para buscarse un sueldo. Si quieren actuar como asesores del concejal del ayuntamiento, muy bien, que lo hagan gratis, desde una segunda fila, porque en el sitio en el que están mucho me temo que más que asesorar al concejal van a presionarlo para que haga lo que ellos quieran. Me estoy jugando que me echen.

-Bueno, pero usted colgó dos post en Facebook sobre esto...

-Me pidieron por favor que los retirase.

-Y los ha retirado...

-Primero me exigieron que los retirase y al que me exigió lo mandé a hacer gárgaras, después otra persona me pidió por favor... He dicho que si en Vox no queremos que dentro de cinco años nos estén recriminando las cosas que le han pasado al PP (porque había mucha gente que sabía lo que había y calló), en Vox no debemos callar las cosas que no nos gustan y que deben ser denunciadas. Es de valientes denunciarlas. A mí me han dicho que no es de valientes, que es de insensatos, pues bueno, será que soy un insensato, pero yo esas cosas no las quiero en mi partido, ni esas ni otras que no me gustan.

-Usted se reunió con Salaya...

-Sí, fue una reunión encantadora. Estuvimos media hora, de la que dedicamos 10 minutos a hablar de vida municipal y el resto de mi antigua pertenencia al partido, contar anécdotas, fue muy grata.

-¿Qué le diría a quienes le afean que es joven?

-Con la edad que tiene nuestro alcalde en Austria ha habido un presidente del país. Si un señor de 30 años ha podido ser presidente de un país tan importante como Austria, ¿por qué un señor de 30 años no puede ser un buen alcalde de una ciudad como Cáceres? Yo en principio al alcalde lo veo con ganas, con muy buena actitud, lo cual es muy de agradecer. Entiendo que yo siendo de Vox el alcalde podría haber tenido una actitud distinta. Tengo que decir con absoluta claridad que no ha sido así, ni de lejos, ni en él ni en ningún otro de los concejales del PSOE.

-Usted fue a la fiesta del Orgullo...

-Sí. Subió David, el concejal, para cursarme la invitación. Los actos empezaban a las ocho de la tarde, pero yo estaba allí a menos cuarto. No fui a representar a mi partido, fui representando a los cacereños y para mí fue un honor.