Mayor implicación y compromiso de los trabajadores en la gestión de la empresa. Este es el principal objetivo que se marcan los responsables de Eroski para intentar fundar una cooperativa al estilo de sus colegas en el País Vasco, donde no existen socios capitalistas y todos son cooperativistas. "La implicación no es la misma siendo un trabajador por cuenta ajena", subraya Manuel Morán, gerente de la empresa de distribución en Cáceres. En este sentido, matiza que "en una cooperativa todos somos dueños, aunque siga existiendo un orden jerárquico" y destaca las ventajas de "depender" de ellos mismos. "Nadie nos va a poder echar porque a un socio de cooperativa no se les despide sino que se le expulsa por una serie de motivos que van a aprobar sus propios compañeros", subraya. La idea del Grupo Eroski es incorporar esta misma fórmula a cada línea de negocio.