Las mediciones realizadas por los propietarios de cuatro de los bares de la Madrila, afectados por el proceso judicial derivado de una denuncia vecinal por ruidos, fue correcta. Así se desprende del auto de la juez encargada de la instrucción de esta causa por el que se desestima el recurso interpuesto por la Asociación Cacereños contra el Ruido oponiéndose a dichas mediciones y pidiendo la anulación de las mismas.

El colectivo ciudadano, en desacuerdo con la forma en la que el pasado 23 de mayo se realizaron las mediciones de ruidos en Latinos, Pasadena, Barroco y Down, por considerar que no es lo mismo hacerlas con ellos abiertos, música y llenos de gente, que medir solo el 'ruido rosa', que es lo que se hizo, recurrió las pruebas realizadas, pero la magistrada ha desestimado su recurso.

Tal y como se realizaron, midiendo el 'ruido rosa', es la forma en que la normativa establece que han de hacerse.

Respecto a lo que aún no ha resuelto la juez instructora del caso es sobre la solicitud presentada por los representantes legales de los cuatro establecimientos citados que, ante el resultado de las mediciones, en todos los casos dentro de la legalidad, han pedido que se levante la medida cautelar de cierre que pesa sobre los mismos. Piden su reapertura, pero sobre esta nada hay aún decidido, y no parece que vaya a haber resolución a corto plazo.

Ello teniendo en cuenta que, aunque la juez ya ha dado traslado de los informes de las mediciones y la solicitud de los dueños de los locales al Ministerio Fiscal y a las demás partes implicadas en el proceso, para que, si así lo consideran, presenten alegaciones, ha dado para ello un plazo de diez días. Es decir, que podrán hacerlo hasta el día 19, por lo que los letrados de los locales estiman que la petición no se habrá resuelto antes de final de mes.

Critican que para el posible levantamiento de la medida cautelar de cierre no se tenga "la misma urgencia que se tuvo para aplicarla, pues hay que recordar que la orden de cierre cautelar se dio el 12 de marzo por la mañana y esa misma noche se ejecutó". Aseguran que la situación "se hace ya desesperante" para los dueños de los locales cerrados, sobre todo, añaden, para los cuatro que han hecho las mediciones, "que les han supuesto cerca de mil euros cada una, y han acreditado que cumplen la normativa". Ante ello, opinan, "ya no hay nada que justifique el tenerlos cerrados".

DEMANDA FISCAL Por otra parte, la fiscal delegada de Medio Ambiente, encargada del caso, ha solicitado al ayuntamiento que se le de traslado de cuantas licencias se disponga referentes a expedientes de licencias, cambios de licencias, expedientes de sanción... de la decena de bares de la Madrila que se encuentra cerrados por orden judicial a raíz de la denuncia por ruidos, cuyo causa se encuentra en estos momentos en instrucción.

Insta, además, a que dicha información se le facilite antes del próximo 26 de julio, fecha en que está citada para prestar declaración la exalcaldesa, Carmen Heras, alegando que se trata de una documentación "imprescindible" para el interrogatorio de la misma.