En el Código Penal hay de todo, como en botica. Y en Cáceres, aunque esté catalogada como la ciudad más segura del país, se cometen la gran mayoría de las tipologías penales de más trascendencia recogidas en el Sistema Estadístico de Criminalidad. Bien lo saben los más de 4.500 cacereños que sufren cada año distintos tipo de infracciones, algunas tan graves como lesiones, agresiones sexuales, violencia de género o violencia en el ámbito familiar, y otras que afectan directamente a su patrimonio como los robos con fuerza en sus propiedades (viviendas, vehículos...) o las estafas. Según los datos facilitados por el Ministerio del Interior, exactamente 4.663 personas denunciaron durante 2017 haber sido víctimas de diversas infracciones penales en la provincia cacereña.

Se trata de un dato ligeramente superior al de 2016, cuando se contabilizaron 4.518 casos de este tipo, y al de 2015, cuando se registraron 4.565. Sin embargo, supone una notable reducción respecto a los años precedentes, ya que Cáceres no bajaba de los 5.400 delitos y faltas. Además, es una de las provincias con menor número de víctimas por causa de infracciones penales, al situarse en el tramo más bajo, inferior a las 10.000 denuncias anuales (en España, durante el último año, se produjeron más de 1,1 millones). En cualquier caso, hablamos de una estadística especialmente delicada, donde el número importa menos que la repercusión que estos hechos suponen en cada una de las víctimas que los sufren.

CONTRA LAS PERSONAS / Porque los hay graves, y muy graves... Los delitos más sensibles son los que se cometen contra las personas: 1.160 en Cáceres durante 2017, afortunadamente por debajo de los 1.204 denunciados en 2016. En este apartado destacan los nueve homicidios dolosos/ asesinatos que se produjeron el pasado año en la provincia, con ocho víctimas masculinas y una femenina, cifra realmente alta y excepcional en Cáceres (en 2016 hubo tres, en 2015 se redujo a dos, y en 2014 a uno). Durante el último año también se produjeron en la geografía cacereña 755 denuncias por lesiones (bajaron notablemente respecto a 2016, cuando se contabilizaron 813). Otro apartado sensible fue el de las infracciones contra la libertad de las personas, con un total de 755 casos.

Precisamente, dentro de los delitos contra las personas y su libertad se encuadran los malos tratos en el ámbito familiar, que suponen la forma de violencia más íntima y repudiable en cuanto que se producen en el lugar donde las personas deberían encontrar su máximo apoyo. Pues bien, en Cáceres, 583 ciudadanos fueron víctimas durante 2017 de hechos graves de violencia en el ámbito familiar, la mayoría mujeres: 509 frente a 74 hombres. Se trata de una lacra que se mantiene más o menos en los mismos términos, aunque en 2016 se superaron los 600 casos.

El Sistema Estadístico de Criminalidad del Ministerio del Interior considera violencia en el ámbito familiar aquellos hechos delictivos graves contra quienes sean o hayan sido pareja o expareja (cónyuge, separado/divorciado, compañero sentimental, excompañero sentimental, novio, exnovio), o contra quienes sean o hayan formado parte del grupo familiar de quien comete estos actos (padre/madre, hijo/hija u otro pariente). Es decir, el sujeto pasivo de los hechos (hombre o mujer) puede ser cualquiera de los integrantes de la unidad familiar.

En esta tipología se incluyen graves delitos comprendidos dentro los títulos del Código Penal de homicidios, aborto, lesiones, lesiones al feto, contra la libertad, tortura y otros contra la integridad moral, contra la libertad e indemnidad sexual, así como quebrantamiento de los deberes de custodia, sustracción de menores, abandono de familia, impago de prestaciones económicas o quebrantamiento de la orden de alejamiento. No obstante, Cáceres también ocupa en estos casos la parte más baja del ranking nacional, con menos de 750 víctimas anuales. Provincias como Sevilla, Málaga, Murcia, Valencia o Madrid superan las 4.500.

Pero existen más tipologías de delitos y faltas de notable gravedad, en concreto contra la libertad sexual. En Cáceres se registraron 10 casos de agresiones sexuales (3 con penetración), otros 2 casos de corrupción de menores o incapacitados, 3 de pornografía de menores, y otros 41 más contra la libertad e indemnidad sexual.

2.274 ATAQUES A LA PROPIEDAD / Si las infracciones contra las personas son las más graves, las que se producen contra el patrimonio son las más numerosas. Concretamente, los cacereños sufrieron 2.274 durante el pasado ejercicio, ligeramente por encima de las 2.127 de 2016. De ellas, la mayor parte correspondieron a hurtos (954), seguidas de los daños a las propiedades (453) y los robos con fuerza en las cosas (312). Entre estos últimos destacaron los robos en el interior de vehículos (109), los robos con fuerza en viviendas (97) y los robos con fuerza en establecimientos (50). También se cometieron 54 robos con violencia o intimidación, de ellos 28 en la vía pública, 4 en viviendas y 11 en establecimientos. Además, se sustrajeron 61 coches a lo largo del 2017.

Dentro de las infracciones contra el patrimonio también sobresalieron especialmente las 320 estafas registradas en Cáceres (13 de ellas fueron bancarias). Existen más hechos delictivos que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado engloban bajo otros epígrafes, por ejemplo las falsedades, con 32 cacereños que se declararon víctimas de estas prácticas.

Curiosamente, los ciudadanos de 41 a 64 años fueron el grupo de edad que refirió haber sufrido mayor número de delitos y faltas en Cáceres durante 2017, con un total de 1.862 casos. A continuación se situó la horquilla de 18 a 30 años (1.075 víctimas de infracciones); de 31 a 40 años (1.013); los mayores de 64 años (393); los jóvenes de 14 a 17 años (174); y desgraciadamente los niños de 0 a 13 años, que en 74 ocasiones también revelaron haber sido víctimas de hechos de este tipo.

Sin embargo, en la provincia hubo más delitos que víctimas, puesto que algunos no son denunciados por nadie en concreto (actúan directamente las fuerzas de orden público) o no afectan directamente a un sujeto, sí a la sociedad en general (por ejemplo los casos de tráfico de drogas). De este modo, en 2017 se contabilizaron 7.662 infracciones penales en la geografía cacereña, cifra inferior a las 7.927 del año precedente. Los delitos contra la seguridad colectiva se elevaron a 384, de ellos 74 por tráfico de drogas y nada menos que 274 contra la seguridad vial. Pese a todo, Cáceres tiene la tasa de criminalidad más baja del país, junto con Teruel, por debajo de las 20 infracciones penales por cada mil habitantes.

Interior aporta datos más concretos. Durante el pasado año hubo en Cáceres 2.841 personas detenidas o investigadas por distintos delitos, sobre todo por los cometidos directamente contra las personas (810), y contra su patrimonio (677). Como consecuencia de las investigaciones de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, en 2017 se esclarecieron 3.568 casos, más de mil relacionados con hurtos, robos, estafas y daños contra el patrimonio, y otros 956 relativos a infracciones contra la vida y la integridad de los ciudadanos.