"La patrona lo es todo para los cacereños porque la Virgen de la Montaña es, sin duda, un sentimiento que nos une", dijo ayer la alcaldesa Elena Nevado, camino de viaje oficial a Santander. La mandataria siente especial devoción por la patrona y la siente, según confiesa, desde que "tenía uso de razón. Mis recuerdos de la Virgen --contaba ayer emocionada-- tienen mucho que ver con Magdalena, mi abuela materna, con la que íbamos al santuario agarradas a su mano. Ella nació en Malpartida, pero desde los 4 años vivía en Cáceres y por la Virgen sentía una gran fe". Una estampa de la patrona luce en el despacho de Elena Nevado desde que llegó a la alcaldía.