Señor director de EL PERIODICO EXTREMADURA, por primera vez en mi larga trayectoria en diferentes colectivos asociativos de nuestra ciudad y en mi actividad política en los últimos 10 años como concejal del Ayuntamiento de Cáceres, me dirijo a un medio de comunicación para defenderme y trasladarle públicamente mi malestar con el trato de su diario hacia mi persona. He de reconocer que desde las páginas de su diario, en algunas ocasiones, se ha reconocido mi labor en positivo, en otras se me ha tratado injustamente y en ocasiones he recibido insultos de carácter muy grave. Todo lo he aceptado sin decir palabra, respetando su opinión y su crítica. Usted sabe que respeto a todos los profesionales de los medios informativos y colaboro con ellos sin ningún límite y sabe por sus informadores, que me llaman de día o de noche y siempre respondo, salgo de mi trabajo o de mi casa a cualquier hora para confirmarle o ampliar información en el sitio más cerca o más lejano y sin ninguna pereza.

Es por lo que no alcanzo a entender los ataques de su periódico hacia mi persona. ¿Qué delito he cometido para que su diario en los últimos meses me haya dedicado 15 páginas, tres portadas y un editorial, acompañado de grandes titulares y grandes fotos? Quiero pensar que sabe que no he cometido ningún delito y sé que sus asesores le han informado que soy víctima de unos aprovechados a los que traté de ayudar en su día y me lo agradecieron en los juzgados, y de una sentencia injusta y desproporcionada.

Usted sabe que quizás cometí el error de solicitar la baja de energía eléctrica en un edificio propiedad del ayuntamiento para cambiar su titularidad, pero sin ningún tipo de maldad hacia nadie. Por primera vez estoy profundamente desilusionado con su periódico por tratar de hacer daño de una forma injusta a una de las partes, alejándose de la verdad y a la investigación real de los hechos y de otros implicados. Usted comprenderá que toda mi sinceridad, honestidad y colaboración hacia su periódico, no sé por qué, casi siempre se vuelve contra mi persona perjudicándome gravemente.