El portavoz del Grupo Municipal Socialista, Luis Salaya, ha precisado hoy que el retraso en la tramitación de un estudio de impacto ambiental en el terreno donde se prevé ubicar el aeródromo de Cáceres no es una decisión política, sino que responde al proceso que se debe seguir para obtener citado informe.

"Nosotros estamos a favor del aeródromo", ha respondido Salaya a las críticas de la alcaldesa, Elena Nevado, quien ha aseverado que "con Vara llevamos cuatro años solo para realizar un estudio de impacto ambiental".

Según Nevado, "en la legislatura anterior estaba todo preparado para la ejecución del aeródromo, con la adquisición de la parcela necesaria a la Fundación Valhondo Calaff".

La primera edil cacereña ha manifestado incluso que "hay que exigir responsabilidades porque esto tiene repercusión en la recuperación económica y la conexión de nuestra tierra".

Al respecto, Salaya ha declarado que "me parece increíble que la alcaldesa se atreva a hablar del aeródromo" y le ha instado a que "le pregunte a Monago qué interés tenía en comprar unos terrenos a una fundación, cuando no estaba garantizado que pudieran albergar esa infraestructura".

Fue en la legislatura de José Antonio Monago cuando se compraron los terrenos para el futuro aeródromo (junto a Los Arenales, en la carretera de Malpartida de Cáceres).

"El estudio de impacto ambiental tiene los plazos que tiene, y en cada espacio es diferente, porque si un insecto tarda en incubar un número de meses, tienen que pasar varios periodos de esa incubación para dar luz verde al estudio medioambiental", ha puesto Salaya como ejemplo.

"Fue una medida electoralista del PP, realizada con prisas y pidieron un estudio que no era el adecuado", algo de lo que informaron los técnicos de la Junta, han aclarado desde el Grupo Municipal Socialista.