Los robos en vehículos siguen siendo una constante en la ciudad, aunque no se repiten con la misma intensidad que a finales del año pasado. Los dos últimos se han producido en la ronda de San Francisco y en la calle Alvaro López Núñez, donde los cacos usaron el mismo procedimiento: la rotura de un cristal para llevarse objetos del interior. Según indicaron fuentes de la comisaría cacereña, en uno de los casos los ladrones se llevaron el aparato de música. Fue el pasado mes de enero cuando un plan conjunto de las policías local y nacional permitió capturar a la principal banda dedicada a estos hurtos.