Guadalupe Mateos tiene 20 años, ha decidido probar suerte y marcharse con una beca Erasmus a Praga (República Checa) para estudiar tercero de Derecho. Su estancia allí será temporal: "voy a estar aquí un año, aunque en el fondo sé que mi trabajo me obligará a estar fuera de mi tierra. A pesar de todo para mí Cáceres será siempre la ciudad más importante". Desde que está en Praga le llama la atención que cuando les cuenta a sus compañeros de universidad que Cáceres está cerca de Portugal, "se sorprenden porque no sé hablar portugués", dice.

"Praga es una ciudad que siempre me ha atraído, con muchos eventos culturales a los que asistir", explica. Sin embargo, reconoce que, en este sentido, "Cáceres no se queda corta y que se merece ser capital cultural europea en 2016 porque tiene una amplia oferta cultural durante todo el año, y además es una ciudad muy bonita".

De su infancia, que pasó en el colegio Las Josefinas, donde estudió hasta Bachillerato, recuerda "aquellas largas tardes jugando en el parque de Cánovas, y los paseos en triciclo que dábamos por el parque del Príncipe, ¡qué tiempos!", dice con morriña. Y para acordarse de esos tiempos y del olor y el sabor de esta tierra, Guadalupe no se ha llevado fotos ni regalos: "he traído el mejor recuerdo de Cáceres que puedo traer: una bolsa llena de productos extremeños que comparto con mis vecinos muchas noches", comenta entre risas.