La Diputación de Cáceres tendrá que hacer frente a una deuda de más de 900.000 euros contraída con la empresa Araplasa, por trabajos realizados en las carreteras de la provincia durante 2008 y 2009. Así lo establece una sentencia que condena a la institución a satisfacer este pago, para lo cual se aprobó una modificación presupuestaria en el Pleno Extraordinario celebrado ayer. Fue el segundo punto del orden del día. El primero, que también recibió el respaldo unánime de PP y PSOE, permitirá a la Diputación cancelar un crédito y financiar el Plan Extraordinario de Inversiones de 2013 (11,2 millones) con su propio remanente de tesorería, puesto que se encuentra en situación de superávit.

Respecto a la sentencia, obliga a la institución a pagar 964.682 euros (la empresa realiza una quita de 30.000 euros) por unas obras de conservación de carreteras realizadas en la anterior legislatura, "sin el procedimiento de contratación pertinente ni el crédito presupuestario necesario", explicó ayer el portavoz del equipo de Gobierno actual, Saturnino López Marroyo.

En concreto, la Diputación adjudicó por un año en 2007 a Araplasa la conservación y mantenimiento de las carreteras del este de la provincia (unos 900 kilómetros) con 300.000 euros para bacheos, refuerzos de firme y limpieza de cunetas. Ese contrato, precisó López Marroyo, se llevó a cabo "con normalidad", pero al finalizar, a partir de agosto de 2008, la empresa continuó prestando el mismo servicio hasta noviembre de 2009, "sin observarse ninguna formalidad en la concertación de los contratos y sin partida presupuestaria".

En este periodo de un año y tres meses se triplicó el precio del contrato inicial por obras ejecutadas por casi igual periodo hasta superar los 900.000 euros, que la empresa ha reclamado por vía judicial. López Marroyo quiso dejar constancia "de esta forma anómala e irregular de actuar" cuando gobernó el PSOE.

Por su parte, el Grupo Socialista votó ayer a favor de la modificación presupuestaria por concesión de crédito extraordinario para afrontar este pago. Su portavoz, Miguel Angel Morales, recordó que "precisamente en 2010 nos pusimos a trabajar sobre el plan de carreteras para evitar esto, para concesionar la provincia íntegra, porque se iban haciendo sobre la marcha las obras en función de las necesidades que los técnicos veían y se iban pagando con contratos".

Por otra parte, la Diputación aprobó ayer una modificación presupuestaria que permitirá dar de baja una operación de préstamo y financiar el Plan de Inversiones 2013 con fondos propios, concretamente con los remanentes de tesorería para gastos generales de la institución.

De los 11,2 millones de euros que contempla dicho plan de mejora de los servicios de los municipios cacereños, el 85% se sufragará de este modo ya que el resto compete a los ayuntamientos. Y ello es posible por la inminente modificación del artículo 32 de la Ley Orgánica de Estabilidad Presupuestaria, que hasta ahora impedía el uso de remanentes para otra cosa que no fuera la amortización de deuda.

PAGOS CUBIERTOS Eso sí, exige varios requisitos que cumple la Diputación: no superar los límites fijados para operaciones de endeudamiento, presentar superávit y remanente de tesorería positivo, y pagar prioritariamente con ese saldo a los acreedores pendientes a 31 de diciembre y los préstamos que incurren en déficit. Si tales obligaciones están satisfechas --caso de la Diputación-- el remanente podrá destinarse a inversiones. La disposición se aprobará en otoño, pero ya se puede avanzar la tramitación.

El PSOE votó a favor, recordando que ya planteó en mayo un Plan de Empleo Local financiado con el remanente de tesorería.