RECUERDOS

El placentino Mariano

Antonio Sánchez-Marín Enciso

El Molar (Madrid)

Recibo ahora mensajes del fútbol, de la Unión Polideportiva Plasencia a través de estas redes sociales modernas que me reconcilian con mi pasado, con un pasado futbolístico que siempre llenó mucha parte de mi vida…

Y tengo un recuerdo para una familia de Plasencia, la familia Hoya, el padre fue mi amigo Mariano, mi mano derecha en mis avatares futbolísticos de juventud, más bien de adolescencia, Escartín me apodaban; y de esa familia, Mariano, el hijo, y su hermano Manolo, jugó en el Deportivo Coruña, en el Celta y en el Recreativo de Huelva… y siempre llevando el nombre de Plasencia con orgullo, incluso, y esto me dice mi hermano Jesús que tiene muchas relaciones futbolísticas por esos pagos, muy gratamente recordado por su buen hacer, por su nobleza, y nunca olvidando sus raíces, atendiendo con mucho afecto a cualquier placentino que se le acercara…

Siempre valorando en su justa medida, sin alharacas, sin medros políticos, como ocurrió en otros casos de personas que en la misma profesión que Mariano no tienen ninguna relación con la localidad más que el hecho de ser paisanaje, o llegan hasta extremos que no superan los méritos precisos, y discriminan, a veces, por espurias razones a otras personas que puedan meritar más razones para su distinción… o pueden exagerar en otros, aunque nunca dude nadie de sus méritos; es la moderación una virtud que las autoridades deben aplicar para el reconocimiento justo y equilibrado que las acciones de los agasajados merecen… lo contrario a esa moderación, lo hiperbólico puede trocarse en burdo y risible… Están estas muchas veces, muy próximas a que les llamen «Abrazafarolas», porque se arriman a la luz que más ilumina en cada momento…

Nuestro deseo, el que expresamos aquí, se acerca más a ese seguimiento que debiéramos hacer de estas «figuras» para que no se «diluya» en el tiempo, con el consiguiente daño moral, los olvidos son muy perniciosos, tienen un coste psicológico, y se puedan evitar casos como el reciente de la gran esquiadora Fernández Ochoa… Un gesto sencillo puede aliviar grandes males postreros. ¡Nada más… y nada menos!

Mariano, al igual que su hermano Manolo, también futbolista de relieve y también dio mucho por Plasencia, fueron «muchachos» nobles y muy humanos que debiera tener un mejor reconocimiento que el que observo, o eso pienso, se le ha dispensado hasta ahora. A partir de su retirada del fútbol, Mariano dio mucho por el fútbol placentino, mucho de su tiempo y de sus preocupaciones, y quizás de su economía por él, sobre todo por los más jóvenes… Dudo que haya tenido la compensación merecida a sus desvelos. Nosotros con este escrito, particularmente, queremos contribuir a este respeto que merece la trayectoria futbolística y personal de Mariano.

JUSTICIA

Tratos muy diferentes

Jordi Adroher

Barcelona

El señor Urgandarin, que se ha hecho voluntario, sale de la cárcel con un coche de última gama sentado detrás como un ministro. Recuerdo que a los presos políticos o políticos presos se les traslada de una cárcel a otra con un furgón de la Guardia Civil en estancias pequeñas. La justicia no es igual para todos.