Garrovillas y el almendro en flor

Somos aficionados a dar «bureos» por nuestra tierra y cada año, si podemos, hacemos 3 rutas para celebrar el regreso de la primavera, en Febrero salimos al encuentro de la flor del Almendro, en Marzo a la del Cerezo y en Abril vamos a Salvaleón a la busca de la flor de Alejandría. Nos pasa un poco como a Fernando Pessoa: «Se soubesse que amanhã morria // E a Primavera era depois de amanhã, //Morreria contente, porque ela era depois de amanhã...». Este año hemos intentado hacer la ruta del Almendro en flor en Garrovillas, para ello seguimos la que hicieron los compañeros del club de la empresa CATELSA de Cáceres, pero antes de llegar a la cantera del Peón nos encontramos con un obstáculo, para nosotros, personas mayores y relativamente prudentes, insalvable: el arroyo Rehana o Retama iba preñado de un impresionante caudal hijo de las últimas lluvias. Como, en la actuales circunstancias, no quisimos tentar la solidez de nuestra salud nos volvimos con el resquemor del fracaso para disfrutar del mosaico de colores de los almendros en flor por las callejas de Garrovillas. La experiencia estimuló nuestro espíritu investigador, ¿cómo era posible que un camino como ese no tuviese un puente?. Y volvimos a nuestros cuarteles para sumergirnos en el estudio de los mapas. Enseguida encontramos el revelador topónimo