Señor Sánchez Juliá, portavoz del PP en la Diputación Provincial de Cáceres: ¿Por qué, en nombre de su partido, ha puesto algunos palos en las ruedas de la propuesta tendente a cambiar el nombre del colegio mayor ubicado en la “Casa Pereros”? Alegan ustedes que colocar el rótulo de María del Rosario Cordero Martín (Charo Cordero) implica desalojar el del cacereño Francisco de Sande y Picón, que fue Gobernador General de Filipinas. Puede que este cargo sea más altisonante y pomposo que el que ostentaba Charo, alcaldesa del humilde pueblo de Romangordo y que, por su buen hacer, tesón y espíritu de sacrificio, fue elegida Presidenta de la Diputación de Cáceres.

Desgraciadamente, se nos fue para siempre la pasada Nochebuena. Por cierto, ¿sabe usted que Francisco de Sande era conocido como «El Doctor Sangre» por la matanza que perpetró de indicios chichimecas? Las Crónicas de Indias hablan de él como de un hombre de «endurecido corazón y agrio carácter», así como de «las arrobas de oros y esmeraldas, que amasó y que alcanzaban los 600.000 ducados, obtenidas de manera poco honrosa». Resumiendo, señor Sánchez Juliá: ¿por qué no dejan ya ustedes, señores del PP, de anteponer el ultranacionalismo hispánico, tan propio de la ultraderecha, a la labor honesta, abnegada y callada de las personas de bien?