Tras varias semana de confinamiento más de uno habrá comprobado que pasar tanto tiempo en casa no es tarea fácil. Sin embargo, es sencillo caer en malos hábitos, como tomar snacks poco saludables entre horas o beber más refrescos de la cuenta. El aumento de peso durante el aislamiento puede acarrear consecuencias negativas para la salud, como debilitar nuestro sistema inmune o proporcionar episodios de angustia o ansiedad. Juana Fraile (Madrid, 25 de marzo de 1973) es médico especialista en Endocrinología y Nutrición. En esta entrevista recomienda tomar el sol siempre que se pueda, aumentar la vitamina D y dejar bien a la vista la fruta, pero sin añadirle más estrés al estrés.

--¿Cuáles son las claves para combatir el sedentarismo durante el periodo de aislamiento?

--Estamos todos confinados en casa para salvar vidas. El teletrabajo y el hecho de no poder realizar deporte al aire libre, puede aumentar el tiempo de sedentarismo de las personas, siendo por tanto necesario incluir en nuestro día a día acciones conscientes para evitarlo. Hay que practicar ejercicio físico a diario y además es una buena opción para relajarse. Gracias a la cuarentena han aparecido un montón de iniciativas en internet para hacer actividades deportivas desde casa dirigidas a todas las edades. Se pueden efectuar diferentes entrenamientos como poner música y bailar, pasear, subir y bajar escaleras, bicicleta estática, juegos de mímica... Una vez finalizado, es muy importante reforzar la higiene e hidratarse.

--¿Cómo evitar comer a todas horas mientras estás en casa?

--Es fundamental que nos marquemos unos horarios fijos de cinco comidas y planificar los menús de forma semanal, así será más complicado que nos lo saltemos. El hecho de estar en casa durante este largo periodo de tiempo nos puede llevar a una sensación de ansiedad o angustia por vernos atrapados y debilitar nuestro sistema inmune. Para mantener un buen estado de salud es relevante seguir una dieta completa y equilibrada, ya que disponemos de más tiempo para cocinar. A fin de que nuestra alimentación sea lo más variada posible, lo primero que tenemos que hacer es una lista de la compra inteligente que integre verduras, frutas, legumbres, pescados azules, carnes magras, frutos secos... Eliminar dulces, fritos, evitar exceso de sal... Y utilizar el horno o la plancha a la hora de guisar. Un consejo que sirve para la población general pero en especial para personas con diabetes, hipertensión u obesidad (reducir el consumo de patatas, pasta y arroz) quienes deben extremar lo que comen.

--¿Hay que evitar los ultraprocesados?

--Los mismos que no debemos comer en otros momentos del año; en esta situación, es de especial interés evitar ultraprocesados (snacks, bollycaos, panteras rosas, tigretones, phoskitos, los nuggets de pollo...), ya que que las situaciones estresantes combinadas con el aburrimiento pueden dar lugar a atracones.

--¿Y los refrescos?

--Hay que sustituir las bebidas gaseosas azucaradas, alcohólicas o los zumos con alto porcentaje de azúcar por alternativas más saludables como el agua, infusiones, té o café.

--¿Qué picoteo sano recomendaría?

--Contra el picoteo emocional lo mejor es dejar en la cocina bien a la vista fruta y, si puede ser, ya lavada y cortada para facilitar su consumo. A media mañana o a la hora de la merienda, la opción más recomendable son los encurtidos, hortalizas crudas (unos bastoncitos de zanahoria o pepino), tostadas integrales con atún, un yogur desnatado, frutos secos (sin pasarse), aceitunas, moluscos al natural.

--Pero, ¿ni una cerveza nos vamos a poder tomar?

--No es necesario que permanezcamos el aislamiento dando muestras de estoicismo, renunciando a cualquier placer de la vida, tentempiés incluidos. Se trata de pasar estos días de la mejor forma posible y más saludable, no ganar un premio a la entereza y la fuerza de voluntad: no añadamos estrés al estrés.

--¿Qué podemos hacer para suplir esas horas de luz y recibir toda la vitamina D que necesitamos en este confinamiento?

--Es importante recibir sol y horas de luz ya que esto supone obtener los niveles de vitamina D que necesita nuestro organismo. Tiene un papel clave en el sistema nervioso, muscular e inmunitario, y especialmente esta vitamina permite mantener una correcta salud ósea y musculoesquelética. Los alimentos que contienen cantidades significativas son principalmente el pescado azul como el atún, las sardinas, la caballa, el salmón... Otras comidas ricas en esta vitamina son los huevos y los lácteos enteros o los suplementos dietéticos (pero éstos sólo se deben tomar bajo la supervisión de un profesional sanitario).

--¿Mantiene su consulta abierta y cómo pueden dirigirse a usted los pacientes?

--No; atiendo a los pacientes desde casa telemáticamente. Ahora ayudo desde mi confinamiento para evitar que las personas se acumulen en una sala de espera y así reducir las posibilidades de contagio o de esparcir el virus. La gente lo agradece mucho. Cuando atiendo a los pacientes hablamos de los logros y las dificultades de las personas que están a dieta, les recomiendo leer, escuchar música y ver películas alegres y bonitas. También quiero recordar, que si alguien tiene algún problema contacte con la clínica San Francisco de Cáceres, deje su teléfono y nos pondremos en contacto con quien nos necesite.