Extremadura podrá reabrir la frontera con Portugal cuando se encuentre en la fase 3 de desescalada, (a partir del 8 de junio) la última de cara a la recuperación de esa nueva normalidad que ha planteado el Gobierno. Si la región cumple todos los parámetros, entraría en esta fase avanzada a principios de junio, cuando ya se recuperaría una flexibilización de la movilidad general y todas las actividades, siempre manteniendo las medidas oportunas de seguridad y distancia.
La reapertura de la frontera con Portugal es una de las cuestiones que el jefe del Ejecutivo regional, Guillermo Fernández Vara, ha trasladado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la videoconferencia de este domingo con los líderes autonómicos. “Portugal sigue siendo el país de Europa que más nos compra y sería bueno que la desescalada fuera llegando también a la frontera con el país que es el principal socio comercial internacional para la comunidad autónoma”, ha señalado Fernández Vara en una rueda de prensa posterior.
En este sentido, el presidente ha destacado que tras siete semanas y sin dejar de hablar del problema sanitario, “hay que empezar a pensar en la recuperación económica”, y hacerlo con un reparto de la carga “distribuido y proporcional a la fortaleza que cada uno tiene”. La unión con Portugal es, a su juicio, una de esas fortalezas de Extremadura y por ello ha abogado ya por pensar en la recuperación del tránsito normal de personas, aunque sin descartar que se establezcan “criterios restrictivos”.
Villanueva del Fresno
Respecto a la movilidad con Portugal, hay que recordar que el paso fronterizo con Villanueva del Fresno quedará abierto al tráfico este lunes, sumándose así a los de Caya y Valencia de Alcántara, ambos permitidos desde que el 17 de marzo el Ministerio de Interior ordenase el repliegue de las fronteras con el país luso y Francia como medida para frenar la expansión del covid-19. Con la apertura de este nuevo paso, que abrirá entre las 8 y las 10 de la mañana y las 7 y las 9 de la tarde, se atiende la petición trasladada por la Delegación del Gobierno en Extremadura al Ministerio de Interior, teniendo en cuenta la demanda de los municipios de la zona y trabajadores por las dificultades y contratiempos que ha supuesto para ellos el desplazamiento a sus puestos de trabajo.
El paso de Villanueva del Fresno, según ha informado la Delegación, será controlado por la Policía Nacional, cuyos efectivos prestan ya este servicio en los accesos permitidos hasta ahora, mientras que la Guardia Civil, apoyada en algunos casos por la Brigada Extremadura XI, se ocupa de la vigilancia de los accesos que permanecen cerrados. Hasta la fecha y desde la entrada en vigor de dicha orden, un total de 1.114 vehículos y 1.250 personas han sido rechazados en los pasos fronterizos de Caya y Valencia de Alcántara, por los que en conjunto transitan una media de 1.500 personas al día.
