Abran los oídos. Dejen que Björk vuelva a sorprenderles con su voz y su música de aurora boreal. Y escuchen, si pueden, alguno de los conciertos de presentación de su nuevo disco, Volta : detectarán un sonido distinto, tan vanguardista como la carrera artística de la islandesa; suena el reactable, un nuevo instrumento electrónico que ha sido desarrollado por un grupo de investigadores de la Universitat Pompeu Fabra. Björk lo ha estrenado en la gira. El primer concierto tuvo lugar en Reikiavik a mediados de abril. Hoy mismo sonará en Nueva York, y el público español también podrá oírlo en julio, cuando el tour recale en Bilbao (día 13), Segovia (15) y Madrid (18).

Pero, ¿qué demonios es el reactable? Se podría decir que se parece a un sintetizador modular: sobre una mesa que alberga una cámara y un proyector se desplazan fichas transparentes de papel o metacrilato equipadas con un código de puntos de dos dimensiones. Hay generadores de sonido, filtros, moduladores... La cámara detecta todos los objetos y sabe cómo se relacionan entre ellos.