Dijo George Bataille que "el erotismo es lo que distingue a la sexualidad humana de la animal". Y artistas como Milo Manara y Guido Crepax lo han llevado a la cima estimulando las fantasías lectoras con sus sensuales, sexis y explícitas viñetas. Como añaden Luis Gasca y Román Gubern en su Enciclopedia erótica del cómic (Cátedra), este es "un medio perfecto para mostrar el erotismo" porque "puede exponer situaciones inhabituales, barrocas o extravagantes de las prácticas sexuales, con mucha más facilidad técnica que la fotografía o el cine".

Pero tras la era dorada del desmelene de la transición, ante la competencia del porno en internet (y sin ningún pelotazo tipo Cincuenta sombras de Grey ), el cómic en España ha dejado de percibirse como marginal y de consumirse mayoritariamente en revistas y fancines a lucirse en ediciones muy cuidadas y de autor, muchas de ellas recopilatorias. Sobrevive reivindicándose como un arte y dignificándose como género, demostrando que --y cita Gasca a Luis García Berlanga-- "el erotismo es la pornografía vestida de Chanel".

"Por primera vez en 20 años los cómics eróticos no se editan con voluntad onanista, para que el lector pueda desfogarse (eso ya lo encuentra en internet) ni porque haya demanda en el mercado. Se publican porque de lo que sí hay demanda es de buen cómic, con calidad gráfica y buenas historias, en este caso eróticas", opina Hernán Migoya, editor de Editores de Tebeos (EDT).

Aunque aún hay gente joven a la que le gusta el cómic erótico, los editores detectan como consumidor mayoritario a un lector más veterano, de más de 30 años, motivado por la nostalgia y el coleccionismo, que desea acceder a clásicos agotados y tener reunidas en libros las historias de sus autores preferidos que en su día leyó en revistas o como historias cortas. Y, a tenor de los comentarios en blogs, añaden que hay más público femenino del que se cree.

Por todo ello las editoriales apuestan por el cómic de autor presentado en cuidadas ediciones. "El creador se esmera tanto en el dibujo como en el guion, busca un resultado más intelectual y artesanal y se dirige a un público más exigente y culto, conocedor del tema, al que le gusta el arte y las buenas historias", afirma el editor de La Cúpula Emili Bernárdez. De ahí que, tras cerrar en el 2011, por la caída de ventas en quioscos, Kiss Comix , la revista icono de cómic erótico nacida en 1991, La Cúpula la haya resucitado, cual ave Fénix, como colección de lujo en tapa dura. Ya llevan tres títulos de alto voltaje: Cuatro amigas , de Atilio Gambedotti; El afinador , de Noé, y Mis 130 , de Chiyoji Tomo.

En la misma línea de recuperar "buen material" de "buenos autores" ha nacido en EDT la colección Libros Verdes, comandada por Migoya, que también dirigió Kiss Comix . Tras Morbo, de Bernardo Muñoz, y Libertinas, de Raúlo Cáceres, ultiman un tercer álbum.

La tendencia se palpa fuera de las colecciones; si hay un álbum de calidad, se apuesta por él. Así, Ediciones B lanzó en el 2012 Las dos sonrisas , una recopilación de historias subidas de tono del guionista Enrique Sánchez Abulí (Torpedo) y el dibujante Félix Vega, y EDT ha reeditado en integral Primeros sueños , el que fue el primer manga erótico de autores españoles --Rafael Sousa, Javi Sánchez--, de 1994.

Norma no olvida a los maestros del erotismo. Si esta semana recuperan Las tribulaciones de Virginia , un clásico para adultos de los 60 de George Pichard y Lob, en el 2012 publicaron el tercer tomo de la Valentina , de Guido Crepax, Los Borgia , de Alejandro Jodorowsky y Milo Manara (el gran referente, gracias a obras como El Clic ), y un recopilatorio de Magnus (Roberto Raviola).

Pero existen otros cómics que, aunque contienen escenas de sexo explícito, este no es el centro de las historias. Es el caso de Omaha, una serie "sexi y erótica, no sexista", según la feminista Trina Robbins, protagonizada por una gata estríper, cuyas aventuras de animales antropomórficos incluyen desde relaciones amorosas y de amistad a la corrupción y las mafias. Nació como serie en 1978, dibujada por Reed Waller y escrita por su compañera, Kate Worley, y ahora Astiberri concluye el integral con el cuarto volumen.

Muestra de que el género se dignifica y normaliza es la rigurosa, científica y amena Enciclopedia erótica del cómic . Cientos de imágenes seleccionadas por Gasca ilustran 200 descripciones de Gubern, de filias, fobias, parafilias y términos relacionados con el sexo.