Buena sintonía y mejor balance, lo que hace posible la continuidad de la dirección actual, ejercida Jesús Cimarro, ya ofrecida por el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara y, en principio, aceptada "si se dan las circunstancias adecuadas y así lo estima conveniente el consorcio del teatro". Ambos comparecieron ayer en rueda de prensa, junto al alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, y la secretaria general de Cultura, Miriam García Cabezas, para dar cuenta del resultado de la 61 edición del festival internacional de teatro de Mérida, el cual termina después de dos meses superando todas las expectativas de público, recaudación y repercusión mediática.

Hasta 93.946 espectadores acudieron este año a una representación en el teatro romano de la capital extremeña, un 13,7% más que en 2014, cantidad que si se le suman las actividades desarrolladas al margen (exposiciones, talleres y acciones culturales) se alcanza la cifra de 158.302 asistentes, un 28,3% más que en 2014.

Al incremento del número de espectadores hay que sumar el superávit económico de las previsiones de taquilla que, a falta de hacer el cierre definitivo, ronda los 525.000 euros, lo que vuelve a superar los objetivos marcados originalmente, fijados inicialmente en un millón de euros. En taquilla se ha llegado a recaudar 1.924.868 euros, un 7,98% más en que 2014. Según Jesús Cimarro, podía haber sido más pero al proponer un 30% de descuento en las entradas de compra anticipada desde marzo muchas adquisiciones de localidades se compraron con bastante anterioridad a los estrenos. Del superávit alcanzado, 100.000 euros se destinarán a respaldar acciones de grupos teatrales extremeños fuera de la comunidad autónoma, anunció Fernández Vara, y el resto irá a pagar la deuda pendiente del festival, a la cual se ha aportado desde 2012 nada menos que 1,6 millones de euros.

A juicio de Cimarro, la lectura de todos los datos permite constatar que se ha "conseguido crear la necesidad de acudir a Mérida en verano para asistir a un espectáculo teatral, tanto desde fuera de Extremadura como desde dentro", una situación a la que "ha contribuido de manera crucial la tan controvertida gala de los Premios Ceres, que aporta aún más vistosidad y difusión nacional al festival". También ha crecido en 2015 la repercusión que ha tenido el Festival de Mérida en los medios de comunicación, donde de junio a agosto, el certamen pudo generar 7.560 noticias en papel, internet, radio y televisión, lo que supone un impacto mediático de 37 millones de euros.