Una multitud de admiradores rindió el sábado un último homenaje al padrino del soul, James Brown, antes de que los restos del cantante fallecido en la madrugada del día de Navidad recibieran sepultura en la ciudad de Augusta, Georgia, en la que transcurrió su infancia y donde pasó los últimos años de su agitada vida.

En el palacio de congresos que lleva el nombre del cantante, los seguidores de Brown desfilaron en silencio ante el féretro del legendario artista, situado sobre el escenario, ante una banda de músicos. A continuación, se proyectó un vídeo de la última actuación del artista en Augusta y su último recital en Londres, en el que interpretó una conmovedora versión del Georgia on my mind de Hoagy Carmichael.