Ganó un Oscar con En tierra hostil y la reputación de ser una de las directoras más osadas de Hollywood. Aunque ella no parece reparar en estas cosas, lo cierto es que el éxito de este filme le animó a trabajar en otro de corte militarista, Triple frontier , relacionado con la guerra del narcotráfico en Suramérica. Pero parece que la idea no cuajó en Hollywood. Por ello, Kathryn Bigelow y su compañero de fatigas, Mark Boal (guionista y periodista), decidieron cambiar de rumbo y de tema poniendo sus ojos en una historia sobre la fallida búsqueda de Bin Laden en las montañas de Afganistán. En ello andaban metidos cuando Osama Bin Laden fue capturado y asesinado en su guarida. La pareja, inmediatamente, cambió el argumento de su filme, centrándose en cómo las fuerzas armadas norteamericanas, dieron, por fin, con Bin Laden. El resultado es La noche más oscura , que hoy se estrena ahora en España.

--¿Dónde estaba usted la noche del 1 de mayo del 2011, cuando Bin Laden fue capturado y asesinado?

--Estaba trabajando con Mark Boal en nuestro primer guion y empezaron a llegar llamadas anunciando que Bin Laden había sido asesinado. Pusimos la televisión y vimos lo qué estaba pasando en Nueva York y Washington. Fue un momento muy emocionante para ambos.

--Un momento que les hizo cambiar la dirección de la película en la que estaban trabajando...

--Sí, porque hasta ese momento nos habíamos centrado en la operación de caza y captura de Osama Bin Laden en las montañas de Tora Bora, en el 2001, y Mark andaba ya muy avanzado con el guion. Cuando llegó la noticia del asesinato de Bin Laden, después de mucho pensarlo, decidimos que teníamos que contar la historia de la captura.

--¿ Por qué su interés en esta historia concretamente?

--Lo que más me interesaba de esta historia era entender la psicología de estos hombres y mujeres que dedican, sacrifican y ponen en peligro su vida para llevar a cabo una misión, en este caso la caza y captura de Osama Bin Laden. Hombres y mujeres que lo dejan todo para dedicarse de lleno a su trabajo, un trabajo que, por razones de seguridad, permanecerá en el anonimato.

--¿Cree que las mujeres tienen una visión distinta a la de los hombres cuando se trata de trabajar en política o en agencias de inteligencia?

--Hay varias teorías sobre ello, una muy interesante es la de Peter Bergen en el libro Manhunt , sobre los 10 años de búsqueda de Bin Laden, y la otra es de Michael Scheuer en su libro Osama Bin Laden . En ambos casos mencionan la predominancia de mujeres tanto en el departamento de defensa como en el servicio de inteligencia. Yo no soy una experta en este tema, pero admito que me sorprendió ver que el papel de la mujer es tan importante en ese área y sobre todo, en el caso de esta historia en concreto, que fuera precisamente una mujer la que tuviera la determinación y la intuición de seguir adelante con esta misión, cuando muchos la daban por perdida.

--El filme ha sido muy debatido en Estados Unidos, por demostrar la brutalidad de las tácticas aplicadas como método de extraer información. Hay una escena, por ejemplo, en la que muestran la tortura de un sospechoso de terrorismo y otra en la que el presidente Obama asegura que no se está utilizando el método del submarino. ¿Cómo explica esas escenas?

--En el filme mostramos cómo los agentes torturan a un sospechoso de terrorismo, eso está basado en hechos reales, que ocurrieron en el 2003. La entrevista a Obama, que también recreamos, se llevó a cabo en el 2009, y, para entonces, el presidente ya había anunciado la intención de su administración de prohibir esas prácticas con los detenidos.

-- También hubo mucha polémica porque se dijo que su intención con el filme era ayudar a la reelección del presidente Obama...

--Es irónico porque toda esa controversia salió incluso antes de que Mark empezara a escribir el guion. Por lo tanto no había ninguna intención o agenda política detrás del filme. Obviamente son comentarios que te distraen de tu cometido, pero yo evité poner demasiada energía en ello porque bastante tenía con dirigir una película que se filmaba en tres países distintos y con un reparto de más de 120 actores, de varias partes del mundo, que hablaban distintas lenguas.

--¿Hasta qué punto contó con la colaboración del Gobierno y sobre todo con la de la CIA?

--Bueno... (ríe) Nuestra anterior película (En tierra hostil ) estuvo muy bien considerada dentro de esa comunidad, lo cual indicaba que si Mark y yo íbamos a estar involucrados en contar esta historia, lo íbamos a hacer con el mayor respeto y la autenticidad posible. Lo hicimos como si fuera un reportaje periodístico, contando la historia a medida que iba ocurriendo.

--¿Qué ha aprendido de la CIA que no supiera?

--Trabajando con las fuerzas especiales, tanto en esta como en mi anterior película, me he dado cuenta de la brillante inteligencia y la increíble dedicación al trabajo que ponen estas personas. El tipo de personas que se siente inclinada a esta profesión y que pasa el proceso de entrenamiento y selección es justo la persona que uno quisiera que estuviera a cargo de estas misiones, tomando la decisión correcta en segundos. Es realmente impresionante.

--¿Ha tenido que mantener alguna información en secreto?

--La película muestra de forma muy honesta lo que hace falta para encontrar a alguien que no quiere ser encontrado. Por ejemplo, torturar a la gente para sacarle información.

--Entiendo, pero, por ejemplo, al final del filme seguimos sin saber que pasó con el cadáver de Bin Laden. ¿Era su intención mantener esa incógnita?

--La belleza del guion y, en mi opinión, del drama de la historia es que al final nos deja con esa importante pregunta en el aire: ¿a dónde queremos ir, como país y como cultura, qué hacemos a partir de ahora? Está claro que la historia ha cambiado gracias a la inteligencia, dedicación y coraje de un grupo de individuos y a las vidas que se perdieron en esa hazaña.

--Muchos críticos de cine la consideran la directora de cine más osada y valiente de América, más allá del cumplido, ¿cree que lo dicen porque es usted una mujer?

--Lo siento, pero es difícil para mí responder a ese comentario porque requeriría que saliera fuera de mí misma para juzgarlo y me resulta embarazoso hacer una valoración al respecto.