Planeta llamó a las puertas de Nach (Albacete, 1974) hace un año. La editorial quería saber qué tenía en sus cajones el poeta rapero. Encontraron mucho material, folios escritos. No eran canciones. Eran poemas viscerales, escritos con “absoluta libertad” sobre su vida, su historia, su lado oscuro. Los últimos cuatro años de Nach -idolatrado cantante que arrasa en sus conciertos y en las redes sociales y que tiene ocho discos de estudio en su currículo- han sido “muy intensos”. Sintió la necesidad de liberar toda esa frustración, soledad y confusión en unos versos. “No sabía si todo eso terminaría siendo un libro”, confiesa el famoso rapero. Pero lo es: 'Hambriento' (Planeta). Y se lo ha presentado en sociedad un poeta ortodoxo de mente abierta, Luis García Montero.
“Estamos delante de poemas. No letras de canciones. 'Hambriento' es un libro de poemas escrito por un cantante muy famoso. Sus páginas narran un itinerario vital y destilan honestidad y verdad. Es el libro de alguien que quiere comerse la vida, que apuesta por el deseo y que no renuncia a nada. Yo, como poeta, agradezco a Nach que se tome en serio la poesía”, sentencia García Montero.
UN VIAJE VITAL
Ante semejante piropo, el poeta debutante (cuyo nombre real es Ignacio Fornés) se ruboriza un poco. Pero también defiende a capa y espada 'Hambriento', que para él ha sido un viaje vital. Dividido en seis capítulos, el libro narra cómo Nach optó por “salir de casa dispuesto a todo”. Encontró miedo y frustración. A pesar del glamur que da la fama, se sintió solo. Volvió a su hogar tras haber madurado, vivido y cambiado. Tras haberse topado con personas que le llenaron y otras que le vaciaron.
“La necesidad de contar mi historia, todo lo que me estaba pasando, estaba por encima de todo, así que no sentí mucho miedo a la hora de escribir. Cuando tuve claro que podía ser un libro me dediqué a organizar todos los poemas. 'Hambriento' me ha ayudado a ubicarme”, explica el cantante, que bromea y recuerda que una vez plantó un árbol. Así que para completar la trilogía vital solo le hace falta tener un hijo porque el libro ya lo tiene. ¿Escribirá más? No lo sabe. “Si lo hago -concluye- deberé tener un motor vital que me lleve a ello”. En todo caso, Nach no pretende dejar de lado la música y lanzarse a los brazos de la poesía. “Se gana mucho más dinero como cantante”, bromea García Montero.
SENSIBILIDAD Y ESTILO ÚNICO
Los editores de Planeta consideran que Nach tiene una sensibilidad y un estilo único. En su opinión, 'Hambriento' es una obra fundamental para los amantes de la poesía urbana. Los lectores encontraran en sus páginas “un oasis en el que refugiarse donde las sensaciones se multiplican y las palabras danzan libres, poderosas y significativas”. Nach, añade García Montero, forma parte de esa generación de escritores que hacen que la gente joven consuma más poesía. “La poesía y la canción han estado unidas desde siempre. En la historia de la literatura la canción siempre ha enriquecido la poesía. Pero, insisto, 'Hambriento' no es un conjunto de letras de canciones. Son poemas escritos por Nach”.
“Vivir es pura inercia, y dicen que nada se pierde del todo. Yo he pasado cuatro años en un laberinto de flores ardiendo, acabando siempre en el mismo alfiler, sentado sobre un horizonte de sucesos viendo el interior de mis agujeros negros”, escribe Nach en el prólogo de su libro, que también llegará a América Latina, donde el cantante es un ídolo, como en España.
