TSteñor Wert , me han dicho que a usted no le gusta la música, que quiere eliminarla en gran medida de nuestro sistema educativo porque no la ve necesaria en la formación de nuestros jóvenes. Pero yo no me lo creo. Seguro que sabe que, además de los valores propios de la música como tal, es decir como arte y como lenguaje (y por tanto como vehículo de expresión y comunicación), está su valor como recurso en el trabajo de otras áreas de conocimiento. La propia responsable valenciana de Educación ha afirmado recientemente que la música puede ser "una herramienta potente para combatir el fracaso escolar"; o que, "Para nuestros escolares, el contacto con la música es algo muy especial".

Seguro que está usted al tanto de que trabajar el lenguaje musical es trabajar, y de qué manera, el razonamiento matemático: una redonda igual a dos blancas, a cuatro negras, a ocho corcheas; un puntillo suma a una figura la mitad de su duración; un compás de 2/4, de 4/4, de 3/8, de 6/8... Los mismos pitagóricos --que situaban el arché en los números-- otorgaban un gran valor a la música; como lo hacían los intelectuales del Medievo --herencia de la Antigüedad Clásica-- que incluían la música dentro del Cuadrivium, junto a la Aritmética, la Geometría y la Astronomía. ¿Y qué me dice usted del uso de la música en la enseñanza de los idiomas? ¿Ha pensado usted que en el nivel de pronunciación de nuestros jóvenes, por ejemplo en inglés, francés o portugués, influye de manera determinante la audición de canciones en esas lenguas? ¿Ha pensado el extra de motivación que tiene trabajar un idioma a través de la música? Un trabajo interdisciplinar entre los Departamentos de Música y de los diferentes idiomas sin duda contribuiría de manera decisiva en la mejora en el manejo de estos. ¿Ha pensado en el valor de la música a la hora de inculcar valores? Estoy seguro de que usted sabe del papel que tienen en la formación moral de nuestros alumnos canciones sobre la paz, sobre la igualdad de género, sobre el respeto intercultural, etc. Siempre la música fue un potente arma reivindicativa, como puede serlo para transmitir valores socialmente aceptados. Recuerde el papel moralizante de, por ejemplo, el Romancero Musical en su día. ¿Conoce el papel de la música en la estimulación de la creatividad? ¿Y para el desarrollo psicomotor? ¿Y para el conocimiento de la historia? ¿y para el manejo del lenguaje, y dentro de éste de una manera muy especial, para la escritura en verso?

XEN MUSICAx los alumnos trabajan la creatividad a través de la composición, incluso de la improvisación; desarrollan la psicomotricidad con el manejo de instrumentos y con los bailes; conocen más y mejor la historia a través del estudio de las músicas de los diferentes periodos; y trabajan los diferentes tipos de estrofas, métricas, rimas, recursos literarios- a través de los textos de las canciones, compuestas por otros y también por ellos. Alguien pudiera pensar que usted defiende que la interesante formación como violinista de Einstein no influyó en el desarrollo, por ejemplo, de su creatividad, o en su autoconcepto, algo esencial en la producción científica y tecnológica. Pero yo no me lo creo. Imagino que usted, señor Wert, siendo tan culto como sin duda es, sabe qué decían de la música ilustres filósofos y escritores como Nietzsche : "Sin música la vida sería un error"; Schopenhauer : "la música es una metafísica hecha sensible"; Víctor Hugo : "La música es el vapor del arte (-). Es el indefinido del infinito"; Calderón de la Barca : "Siempre la música fue el imán de mis sentidos"; Alphonse Karr : "Una nota es un ala puesta al pie de un verso". También estoy seguro de que conoce un informe de la Unesco que dice que los países de la OCDE que obtienen buenos resultados en el informe PISA parecen coincidir con los que tienen mejores programas educativos en artes, entre los que la música tiene un papel esencial. Seguro que sabe que, por ejemplo en Finlandia, cuyo sistema educativo se nos pone como ejemplo desde su ministerio, muchos aprendizajes (como la lectura) se realizan echando mano de la música, por lo cual se adquieren mejor y en menos tiempo, para lo cual los profesores deben tener una contrastada formación en esa disciplina.

Por favor, Sr. Wert, en aras de la cultura y de la formación de nuestros niños y jóvenes, no siga usted adelante con ese plan macabro de reducir drásticamente la música en nuestro sistema educativo; continúe dando una oportunidad a la música, la oportunidad que merece toda aquella disciplina académica que, como ésta, ayuda a formar personas cultas, trabajadoras, solidarias, buenas y libres.