El último libro de Juan Villoro nació en Chile. Fue el editor de la Universidad Diego Portales, Andrés Braithwaite --"un tipo a la vez vehemente y riguroso"--, quien le pidió una selección de ensayos literarios que respondieran a un dibujo secreto. El escritor mexicano armó con textos nuevos y antiguos --conferencias, seminarios, prólogos-- un libro que funciona a partir de una cita de Hamlet que el poeta Tomás Segovia tradujo a golpe de sencillez. En vez de "Ser o no ser. Esa es la cuestión... o el dilema", optó por un "Ser o no ser. De eso se trata". "Así, naturalísimo y misteriosamente sencillo", dice un admirado Villoro, y esa frase-hallazgo, De eso se trata , da título al libro, recuperado ahora para la edición española por Anagrama.

La naturalidad es el hilo donde se ensartan los pequeños ensayos escritos con voluntad de que se lean como relatos. Villoro salta de los seminales Shakespeare y Cervantes a ilustrados como Lichtenberg, Goethe y Rousseau, pasando por autores latinoamericanos como Juan José Saer y Onetti, clásicos como Chéjov o contemporáneos como Hemingway y Klaus Mann.