El Extremadura Arroyo cedió ayer su cuarta derrota en esta temporada en la que debuta en Superliga. Cayó 0-3 (12-25, 20-25 y 22-25), pero plantó cara al intratable líder de la competición, el Embalajes Blanco Tramek Murillo, al que obligó a desarrollar su mujer juego, sobre todo en el segundo y tercer sets, disputados de poder a poder.
El equipo extremeño, que jugó sin su colocadora titular, Beatrix Meléndez-Pál, estuvo más que aceptablemente dirigido por María Larrakoetxea, quien debió lidiar durante todo el encuentro con el complicado saque rival y la altísima envergadura de su bloqueo, que cortocircuitó de forma certera uno de los puntos fuertes del juego ofensivo local, el ataque a primer tiempo.
La formación riojana saltó a la cancha del pabellón Municipal de Arroyo de la Luz dispuesta a sentenciar el choque por la vía rápida. Y casi sin darse cuenta, la afición local veía como la desventaja en el marcador iba creciendo de forma progresiva (1-4, 4-8, 6-13, 9-18), sin que el técnico extremeño, Adolfo Gómez, pudiese encontrar alguna solución para parar a su adversario.
El 12-25 con que finalizó el primer set refleja bien a las claras la neta superioridad visitante, ante un Arroyo que de salida mostró un cambio en relación a partidos anteriores, el de Gala Clemente en labores de opuesta, en lugar de Loly Camisón.
En el segundo parcial la película cambió de forma sustancial y fue la formación cacereña la que cogió de inicio la iniciativa en el marcador (4-1, 7-3), merced a un mejor ajuste entre la defensa en primera y segunda línea y una mayor clarividencia en ataque, donde de nuevo emergió la figura de Alba Sánchez para convertirse en la máxima anotadora de la escuadra de Arroyo.
Sin embargo, a partir del 16-17, el Murillo de nuevo puso tierra de por medio gracias a su altísimo bloqueo, para acabar concretando el parcial por 20-25.
En la tercera manga, la igualdad en el electrónico fue si cabe todavía mayor (3-3, 8-8, 13-13, 19-20), pero a pesar del esfuerzo del cuadro cacereño defendiendo pelotas imposibles de los potentes ataques rivales, terminó decidiendo la diferencia de altura de las centrales de ambos equipos (1.85 de Flavia Lima y Helen Silva, por los más de 1.90 de Gritzbach y Pejkovic).
La próxima jornada, el equipo extremeño volverá a jugar en su cancha, en esta ocasión ante el Haro Rioja Voley, que en esta jornada se ha impuesto por un rotundo 3-0 al Feel Volley Alcobendas.
