Las dudas, después de dos empates seguidos en Liga y una imagen irregular, se han quedado a un lado en la mentalidad de un Atlético que puede sellar esta noche su plaza en octavos de final de Champions, si gana en Alemania ante el Bayer Leverkusen (21.00 horas) y la Juventus hace lo propio en Moscú ante el Lokomotiv. Entonces no quedaría más que dirimir el primer puesto del grupo con los italianos, una preocupación menos para un Atlético que necesita tiempo para engrasar los mecanismos.

El Atlético está inmerso en una tendencia peligrosa de pasar con más pena que gloria por los primeros tiempos, sin intención ofensiva ni ocasiones, con problemas después para resolver los partidos. «Estamos trabajando en consecuencia, hemos mantenido la regularidad en pocos partidos, tenemos que hacer más estable la imagen del último segundo tiempo», reconoció Simeone. «No nos ha ayudado la falta de contundencia, podíamos haber resuelto varios partidos que no se dio», justificó más adelante el técnico argentino ya desde Alemania, donde hoy espera mejorar.