En solo cinco partidos de los 20 que ha disputado el Barcelona en la Liga ha terminado con la portería a cero, otro rasgo que revela su inestabilidad. Tan solo el 25% de fiabilidad absoluta, un porcentaje sensiblemente inferior al que solían tener los azulgranas en las cuatro últimas temporadas. Tres de esos cinco partidos han sido en el Camp Nou (Valencia, Granada y Espanyol) y solo dos han sido lejos de su casa: Rayo Vallecano y Levante. Es el peor registro. Y si se amplía a los 33 partidos oficiales que ha disputado el Barça en este curso, tan solo en 11 ocasiones Valdés y Pinto en los partidos de Copa, no han tenido que agacharse a recoger el balón de la red.

En Anoeta, además, se dieron situaciones muy curiosas, además de los tres goles, que no son el récord negativo de esta temporada (el Deportivo le metió cuatro en Riazor, pero perdió). La Real, por ejemplo, realizó 14 remates y seis fueron a portería (tres goles). El Barça, en cambio, hizo ocho disparos, cuatro a puerta (dos goles y dos postes).