«Si ganamos en Alcorcón, nos mantenemos seguro». En el Diocesano de División de Honor juvenil el próximo encuentro fuera de casa es capital para su permanencia, un año más, en la élite.

El encuentro del sábado se adivina, en efecto, capital para los de Adolfo Senso, que marcan ahora la salvación momentánea con un total de 27 puntos, a falta de cuatro jornadas para la finalización del campeonato. Con los mismos puntos, pero en zona de descenso, está el Unión Adarve, y después Alcorcón (26 puntos) y ya descendidos Canillas (14 puntos) y Almendralejo (13).

No se espera fallar ante el rival directo, pero si así fuera habría que apurar en los otros tres encuentros, en los que el cálculo es no menos nítido en cuanto a números. En realidad, puntuando en Alcorcón y venciendo en los dos de casa (Majadahonda, jornada 28, y Almendralejo, 30 y última) es evidente que se logrará el objetivo. El otro partido es, en principio, bastante más problemático de sacar adelante, ya que es en casa del Rayo Vallecano.

En el Diocesano apelan a la confianza que le confiere el comportamiento del equipo en las últimas jornadas, venciendo a domicilio a un rival de la zona media como el Santa Marta (0-2) y plantando cara el pasado domingo al líder, el Atlético de Madrid, que ganó con apuros con goles en el segundo tiempo (0-2).