Hace más de una década que Mérida y Extremadura no disputan un derbi de este calibre en Segunda B en el Estadio Romano. Ha llovido tanto que hasta el agua ha borrado las siglas de unos y otros de aquel partido. El Mérida se arropaba con las de UD y el Extremadura con las de CF. Las dos entidades han cambiado (AD y UD), aunque el sentimiento y sus aficiones siguen siendo los mismos. Aquella tarde del 20 de agosto de 2006 ganó el Extremadura con gol de Velasco, curioso apellido que en su figura nada tiene que ver con el ahora técnico azulgrana. Por entonces, Carlos Rubén era estrella romana y ahora es casi suplente en el Extremadura; Santi Amaro era azulgrana y ahora asoma detrás de la grada emeritense; y un tal Julio Cobos daba sus últimos balonazos antes de ponerse el chándal, mientras el domingo se sentará en la grada del Romano observando como ni unos ni otros se acordaron de su nombre en estas últimas ajetreadas semanas de relevos en los banquillos. Sólo hace de aquello diez años, aunque para los que lean estas líneas les parezca una eternidad.

Nuevamente se viene el derbi entre las dos ciudades que más dulces mieles han saboreado. La rivalidad nunca dejó de existir, pero los clubes mantienen unas excelentes relaciones. Fruto de ello se estableció el acuerdo de ajustar el precio a seis euros para los abonados del equipo contrario, en este caso el Extremadura. Se le llamó el ‘derbi de las mil pelas’, aunque viendo la clasificación más bien sería el de las mil urgencias. Porque tras rebasar el primer cuarto de liga, Mérida y Extremadura están en descenso y han quemado ya el comodín del banquillo. La presión y el favoritismo recaen sobre el Mérida, confeccionado para el playoff, aunque en los últimos días la erupción se ha trasladado al volcán de Almendralejo, con sólo dos puntos de los últimos 18.

Falta de gol

Una de las claves de este horripilante inicio de ambos hay que focalizarla en la alarmante falta de gol. El Mérida lleva siete tantos, el tercer peor registro. El Extremadura sólo cinco, el peor. En el conjunto romano la preocupación descansa en los hombres destinados a esta faceta. Hugo Díaz y Yacine, los ‘nueves’ puros, no han marcado en nueve partidos de liga. Ni un sólo gol. A Hugo Díaz le ha lastrado su lesión en el pie que le ha llevado a perderse mes y medio de temporada. El pasado fin de semana, cuando parecía engrasar la maquinaria, vio una absurda segunda amarilla que lo deja fuera del derbi. Yacine también se ha perdido hasta cinco partidos por sanción. Competición lo castigó con cuatro por un codazo a inicios de año y el domingo regresa tras ser expulsado por doble amarilla. En cualquier caso, ninguno de los dos ha carburado aún. En el Mérida han vivido del talento de un superclase como es Hugo Rodríguez, que lleva un par de semanas fuera por molestias y que regresará el domingo. Su bota derecha es un guante a balón parado y aunque sólo lleva dos goles, es el máximo realizador.

Un pichichi de escuetos números luce también el Extremadura, con los dos tantos de Willy. Los azulgranas están negados de cara a portería. David Agudo, Curro y José Manuel han anotado el resto de tantos, pero lo preocupante es su capacidad de definición. «Ahí tenemos que mejorar mucho», ha advertido Juan Velasco.

Sensaciones

El derbi viene marcado por la incógnita de saber qué imagen ofrecerán Mérida y Extremadura el domingo. Los emeritenses parecen más recuperados de su racha negativa y han encadenado cuatro puntos de los últimos seis, aunque el empate en Sanlúcar de Barrameda haya sentado mal en el seno del vestuario. Del último enfrentamiento oficial entre Mérida y Extremadura de hace dos temporadas sólo quedan Borja y Javi Chino. Éste último tiene claro que el del domingo «son más que tres puntos. Hay muchos compañeros nuevos, pero ya se les dijo en pretemporada que éste era un partido especial». Del Extremadura quedan varios. Saavedra, Barragán, Curro, Willy o Diego ya saben lo que es ganar en Mérida con la camiseta azulgrana. Lo hicieron en abril de 2015, justo en el redebut de Juan Marrero como entrenador. Aquel día el Extremadura ganó 0-1 con gol de Juanjo Gracia, que ahora está en el Eldense, un equipo que lleva cero puntos de 27 posibles, es el peor conjunto de toda la Segunda B, ha cambiado dos veces de entrenador y esta semana veía como dimitía su presidente. Aquello sí parece una catástrofe. Esto, de momento, sólo es un derbi con muchas urgencias.