CACERES PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD: José Marco (0), Luis Parejo (7), Sergio Pérez (12), Rolandas Jakstas (19), Tautvydas Slezas (8) --cinco inicial-- Ben Mockford (0), Alvaro Frutos (8), Guille Corrales (6), Añaterve Cruz (5), Víctor Serrano (8).

PRAT JOVENTUT: Gerbert Martí (13), Sergi Costa (6), Xabier López-Arostegui (0), Alex Ros (19), José Coego (4) --cinco inicial-- Albert Homs (2), Oscar Amo (4), David Iriarte (3), Zoran Nikolic (3).

MARCADOR POR CUARTOS: 16-14, 31-30 (descanso), 55-45, 73-54.

ARBITROS: Morales y Zamora.

Ganar por 19 puntos (73-54) no siempre esconde sensaciones positivas. El Cáceres Patrimonio de la Humanidad solamente las ofreció ante el Prat Joventut cuando el tercer cuarto avanzaba. Hasta entonces había sufrido demasiados problemas, pero lo importante era retomar la senda del triunfo y se logró.

La primera parte fue rara. O, directamente, mala. Tan extraña que, con el balón en juego, la mascota que intenta darle ambientación a los partidos, un muñeco con traje medieval, se paseó en una jugada por delante del banquillo local ante la estupefacción de reservas y cuerpo técnico. Inédito.

Anécdotas aparte, muy poco baloncesto se vio durante esos 20 minutos iniciales. El Prat había llegado sorprendentemente sin dos de sus mejores jugadores, Xavi Forcada y Agustí Sans, y un tercero, Alex Piru Ros, alcanzando el pabellón a falta de pocos minutos para el salto inicial.

El filial del Joventut parecía así una víctima fácil para los verdinegros, en línea ascendente si se olvida el naufragio de Huesca el viernes anterior. Pero quizás verlo tan sencillo no les ayudó, firmando un arranque flojo que dio la iniciativa a los visitantes.

En todo caso, no era para preocuparse. Una pequeña racha local a base de correr el contraataque situó un 16-11 en el marcador (min. 7) que parecía el arranque de un hipotético paseo.

No fue así. En ese momento, entre el final del primer cuarto y el inicio del segundo, el Cáceres encadenó seis minutos sin anotar, en una lamentable sucesión de fallos en buena y mala posición, aderezada por un buen puñado de balones perdidos. Menos mal que el Prat tampoco estaba acertado y apenas se aprovechó de ello. Además, Rolandas Jakstas cometía pronto su segunda falta, pero eso no le impediría, a la larga, hacer un gran encuentro, al igual que su compatriota Tautvydas Slezas.

Víctor Serrano, el último que había logrado una canasta, rompió el mal fario, pero lo único que abrió fue una fase igualada en la que, eso sí, brilló la muñeca de Sergio Pérez, clave para que al menos la ventaja fuese cacereña al descanso (31-30).

SEGUNDA PARTE A falta de acierto, al menos había que jugar con más energía. Un inteligentísimo robo de balón de José Marco (la defensa no es precisamente su especialidad) fue el inicio de una fase de mayor implicación por parte de todos. Eso se tenía que notar obligatoriamente en ataque (41-35, min. 25).

Era el momento de intentar romper el partido, evitar como fuese la lotería de un final igualado. Triples de Añaterve Cruz, Jakstas y dos de Guille Corrales --el día que meta desde lejos, llegará muy alto-- señalaron el camino (55-45, min. 30). Interesante también el rato en el que Alvaro Frutos jugó como escolta. Ben Mockford solamente jugó 9 minutos y no llegó a encestar: otro mensaje diáfano de que las cosas no le van nada bien.

Había que rematar el trabajo y pasar a otra cosa. Se logró sin dificultades, prolongando la línea ascendente en el juego, encontrando cada vez mejores posiciones, evitando despistes en defensa. Sí se pareció entonces al Cáceres que ha ganado a buena parte de los grandes de la LEB Oro y que camina con holgura hacia la permanencia y, acto seguido, hacia la lucha por meterse en los playoffs de ascenso. Hubo hasta tiempo para dar su segundo partido en esta liga a Alberto Cano, el junior que está echando una mano en los entrenamientos.