Para nosotros el playoff va a tener siete partido», dice seguro Santi Polo, segundo entrenador del Cacereño, que mete en esa cesta el duelo de este domingo, el último de la liga regular, el que servirá para definir quién es el segundo clasificado del grupo extremeño de Tercera. Empatados a 77 puntos, la ventaja es para los verdes por la diferencia de goles, con un margen a su favor de cinco tantos.

«El del domingo ante el Diocesano es nuestro primer partido de playoff», repite Polo, que basa su afirmación en cuatro puntos: «Tenemos la necesidad de ganar; no hay un once tipo, por lo que cada jugador sabe que hay que ganarse el puesto en cada entrenamiento, en cada partido; es un derbi y ellos tendrán ganas de hacerlo bien; y a siete días de que comience lo más importante, es vital empezar con buen pie».

‘OTRA COMPETICIÓN’ / No pasa el Cacereño por su mejor momento y no es fácil dar un diagnóstico a lo que le sucede. «Var a los jugadores entrenar es un espectáculo, pero luego llega el domingo y se nos pone todo de espaldas», dice el ayudante de Adolfo Muñoz. Circunstancias, detalles, la falta de suerte, las decisiones arbitrales («algo en lo que no debemos excusarnos»)... Todo empezó en Navalmoral, «un partido que no debimos perder». «Lo que hay que hacer ahora es ganar al Diocesano y centrarnos en quien nos toque», añade Polo, para quien la fase de ascenso es como una competición nueva, donde todo cambia. Sabe de lo que habla. Ha jugado doce.

A partir del lunes los problemas de la liga quedarán atrás y ya solo importará el rival que toque. «El equipo ha demostrado que tiene fútbol, que puede hacer bien las cosas. Si estamos como en la primera vuelta, podemos ganar a cualquiera», puntualiza él, que ve al equipo preparado para afrontar la fase de ascenso, «físicamente bien». Eso sí, antes hay que ganar al Diocesano. «Si no ganamos, no merecemos ser segundos», afirma rotundo. Porque la derrota podría incluso servir si el Moralo no gana al Arroyo, un equipo que, al igual que el Diocesano, ha alcanzado ya el objetivo de la temporada.

LESIONADOS / El Cacereño empieza a recuperar a jugadores y eso es un punto importante para encarar la fase de ascenso. Marcos Torres ya entró en la convocatoria del pasado sábado, aunque no llegó a jugar. Ayer entrenó «muy bien», dice Santi Polo, al mismo ritmo que el resto de la plantilla. Podría reaparecer este domingo. También Collantes, que está en la etapa final de su recuperación y quizás goce de algunos minutos ante el Diocesano para empezar a coger ritmo de competición. Dani Muñoz sigue con los problemas de pubalgia que le impiden estar al cien por cien, pero no jugar. Sí se perderá el derbi cacereño, además de Carlao por sanción, Carbonell, que sufre una pequeña rotura fibrilar.