La final de Copa del Rey eleva un derbi madrileño con toda su rivalidad histórica al estadio Santiago Bernabéu, donde José Mourinho puede prestar su último servicio al Real Madrid, antes de anunciar su marcha, ante un Atlético que se aferra a su fiabilidad en finales con Diego Simeone (21.30 horas, La 1).

La Copa del Rey puede ser el broche a la etapa del técnico portugués en el banquillo blanco. Tras conquistar una Liga, una Copa del Rey y una Supercopa de España, Mourinho puede dar su segunda competición copera, la decimonovena de la historia del Real Madrid.

Maquillaría una temporada en la que el Real Madrid se dejó llevar en Liga, sin la motivación con la que conquistó la pasada temporada la 'Liga de los récords', y de nuevo volvió a quedarse a puertas de la final, por tercer año consecutivo, en Liga de Campeones. La Copa se ha convertido en el todo o nada y la opción de Mourinho de despedirse ganando.

Se despedirá con un once condicionado por la situación actual. Con el capitán Iker Casillas en el banquillo y sin Pepe en el centro de la defensa, castigado desde que realizó unas declaraciones posicionándose del lado del portero, al que pidió respeto en el trato que le da el cuerpo técnico en sus comparecencias.

La lesión de Raphael Varane provocará que el titular sea Raúl Albiol, que apenas ha contado esta temporada. Recupera a tiempo a dos jugadores claves. Son Sergio Ramos, lesionado ante el Borussia Dortmund, y Mesut zil, que se dañó el tobillo hace nueve días.

Más dudas dejan jugadores que regresan también de sus lesiones de mayor duración. Alvaro Arbeloa y Marcelo no estarán en los laterales. Sus puestos los ocuparán Michael Essien y Fabio Coentrao. La plantilla deja de lado el pulso con su entrenador y se ha conjurado para ganar el título. No ha habido una preparación especial, ni arengas de Mourinho. Los jugadores han optado por una comida de unión antes de la gran cita.

Enfrente, el Atlético tiene varias deudas pendientes: en la Copa, una competición que no gana desde hace 17 años, en la que ha perdido sus últimas tres finales; con la afición en este torneo, ya que en la memoria pervive el ánimo que le brindaron 60.000 seguidores en el Camp Nou tras perder en 2010 con el Sevilla; y en los derbis.

RACHA ETERNA No vence el conjunto rojiblanco a su eterno rival desde el 30 de octubre de 1999. Desde entonces se han disputado 25 derbis, ninguno con triunfo del Atlético, que ahora apela a su mejor curso desde el 'doblete' y a su indudable solvencia en las finales jugadas bajo el mando de Diego Simeone durante el pasado año.

Tampoco partía como favorito contra el Athletic, en la Liga Europa, ni frente al Chelsea, en la Supercopa continental, pero se adueñó de ambos títulos en 2012 con dos actuaciones impecables y dos goleadas incontestables: 3-0 y 1-4, respectivamente.

Simeone es un especialista en las finales. Dos jugadas y dos ganadas con el Atlético. Cuida hasta el más mínimo detalle. De momento, ya ha recuperado el espíritu del 'doblete' con una concentración en Los Angeles de San Rafael, al estilo de la que vivió como jugador antes de la mágica tarde contra el Albacete con la conquista del campeonato liguero en mayo de 1996.

Ya tiene definido su once para hoy desde hace días. No tiene bajas por lesión ni por sanción y, por tanto, contará con su equipo tipo, liderado por Falcao.