Asafa Powell es el plusmarquista mundial de los 100 metros (9.77 segundos), un atleta portentoso, pero proclive a las lesiones. Esta ha sido al menos su principal excusa cada vez que algún aspirante a ser el más rápido le ha retado. El jamaicano eludió el enfrentamiento con Justin Gatlin en el 2005. Acertó, porque éste finalmente fue sancionado por dopaje. Con el estadounidense Tyson Gay tampoco se ha enfrentado en este 2007, recurriendo a finales de junio a una lesión de la que luego se ha recuperado. No era para menos: Gay ha sido la revelación de la temporada tras su espectacular doblete en 100 y 200 metros en los trials (pruebas de selección) de Estados Unidos.

Afortunadamente, el encuentro Powell-Gay, de 10 segundos o menos, parece que por fin será posible. La gran cita es en Osaka, este fin de semana, con la final de los 100 metros lisos de mañana (15.20, hora española).

Como Carl Lewis

Powell fue el gran ausente en el pasado Mundial de Helsinki (2005), por una lesión, y tiene hambre de títulos. Gay, con su entrenador Lance Brauman cumpliendo condena en la cárcel por falsificar documentos a su favor, sorprende por la rapidez en llenar el hueco dejado por Gatlin. Los estadounidenses exhiben cinco oros individuales (entre hombres y mujeres) de Helsinki-05 en 100, 200 y 400 metros, y el copo absoluto en los 200 metros masculinos, en los que, además, el cuarto atleta fue Gay en un 1-2-3-4 inédito en los Mundiales. Pero EEUU parece dispuesta a superar en Osaka su récord de la capital finlandesa.

Gay (9.84 segundos en 100 y 19.62 en 200 esta temporada, líder mundial en las dos distancias) es un atleta que dobla el hectómetro sin apenas variar su velocidad. Su estadística le aproxima a la de Carl Lewis. Pero hay más candidatos para derrotar a Powell (9.90 segundos esta temporada) en los 100 metros, o incluso a Gay en los 200. Como Walter Dix, un universitario de Kansas, situado a 3 centésimas de Asafa en los 100 metros y a 7 de Tyson en los 200.

Pero, de momento, en estas dos primeras jornadas de los Mundiales de Osaka, el protagonismo se lo llevará el esperado, anhelado duelo entre Powell y Gay, los dos velocistas del momento que, además, este año permanecen invictos. ¿Cómo es posible Pues porque han evitado enfrentarse entre sí.

Récord en peligro

Las pequeñas lesiones que han arrastrado han servido de pretexto perfecto. El resto lo han hecho sus representantes, que han ido calentando el enfrentamiento al prorrogarlo hasta Osaka. El año pasado, en cambio, ambos se midieron en cinco ocasiones... y siempre ganó Powell. Uno de los dos, si no surgen sorpresas mayúsculas, podría ser el primero en llevarse 160.000 dólares de premio, resultante de sumar los 60.000 dólares que se ofrece a cada campeón a los 100.000 que la federación internacional pagará por cada récord del mundo. Los 9.77 segundos de Powell corren peligro, como demostró él mismo el año pasado al igualar en dos ocasiones esa marca. Será más importante aún el prestigio del nuevo campeón, que será inedito.