FRANCIA: (10+18) Karaboue; Abalo (1), Junillon (2), Karabatic (5), Dinart (-), Guillaume Gille (3), Guigou (2) -equipo inicial-, Narcisse (3), Kempe (1), Bosquet (4), Girault (6, 2p), Sorhaindo (1) y Omeyer (ps).

ESPAÑA: (14+12) Barrufet; Davis (-), Iker Romero (3, 1p), Chema Rodríguez (1), Ortega (3), Rocas (4, 1p), Juancho Pérez (1) -equipo inicial-, Juanín García (-), Lozano (4), Raúl Entrerríos (2), Belaustegui (1), Garabaya (1) y Hombrados (ps).

ARBITROS: Sergiu Cirligeanu (RUM) y Gheorghe Bejenariu (RUM)..

M. C. C. M.: 0-3, 1-6, 3-9, 8-13, 10-14; 13-17, 17-17, 19-21, 23-23, 25-24 y 28-26.

La selección española, vigente campeona mundial, no pudo comenzar la defensa de su corona de la Supercopa con un buen resultado, porque sucumbió ante Francia (28-26) en una segunda mitad pésima, en la que naufragó después de una primera parte para la esperanza.

El cuadro de Juan Carlos Pastor vivió en Bremen la cara y la cruz. El primer tiempo fue por momentos brillante y en el segundo se desmoronó en defensa y en ataque y los hombres de Claude Onesta lo aprovecharon para llevarse la victoria.

Resguardados en otra actuación portentosa de David Barrufet, el meta español en el primer tiempo, los chicos de Pastor dieron la impresión de sentenciar el choque en un cuarto de hora con un 1-8 y un 3-10.

La defensa hispana, la labor de Barrufet y el dinamismo en ataque, donde sobresalió el pívot Rolando Uríos, otorgaron a España un dominio claro que aplacó, no obstante, Francia cuando cambió a defensa 5-1 y comenzó a despertar el lateral Nikola Karabatic. El 10-14 al intermedio era un leve reflejo del dominio del equipo de Juan Carlos Pastor.

DESASTRE España chocó ante la defensa 6-0 de Francia, mucho más activa y efectiva, y se desmoronó atrás con David Davis de adelantado. Consecuencia, los de Onesta comenzaron a recortar distancias con una espectacular rapidez hasta conseguir empatar por primera vez a 17 (m.40) e incluso adelantarse con un 22-21 tras una diana de Guillaume Gille. Ni Chema Rodríguez ni Raúl Entrerríos dieron luego la calma y el orden necesario al ataque hispano, que se estrelló ante la defensa rival.

España se jugará su pase a semifinales mañana (18.00 horas) contra Suecia en el Boerdelandhalle de Magdeburgo.