Con dos oros y una plata, España se ha posicionado tercera en el medallero de la exigente cita internacional que han afrontado componentes del equipo nacional en el Abierto de Egipto. Los primeros puestos en el podio de Francisco Salazar (en katas) y Cristina Vizcaíno (kumite combate), y la plata de Matías Gómez (también en kumite), han hecho que el karate español siga estando al máximo nivel en el ranking mundial.

El extremeño Manuel Rasero, campeón de España en varias ocasiones, concluyó en séptimo puesto, firmando otra buena actuación, aunque peor de lo que él hubiera deseado, acostumbrado a vencer a sus rivales en la mayoría de las ocasiones.

A estas tres medallas hay que sumar la conseguida por Sandra Sánchez en katas, quien, aunque competía en representación del Club Al Ahli de Dubai, también ha supuesto un triunfo para España, puesto que Sánchez forma parte de la selección.