Khimki: (12+18+22+11) Booker (20), Gorenc (8), Torres (3), Petrenko (11), Wolkowisky (8) -equipo inicial-, Pozzecco (8), Okulaja (-), Fridzon (3), Levter (2), Tsypatchev (-), Krassnikov (-) y Savkov (-).

DKV Joventut: (15+28+26+19) Bennett (6), Rudy (17), Mumbrú (9), Flis (4), Betts (3) -equipo inicial-, Barton (18), Archibald (9), Huertas (12), Vázquez (6), Pau Ribas (4) y Norel (-).

Arbitros: Lamonica (ITA), Koromilas (GRE) y Keseratar (TUR). Eliminados por cinco faltas Betts (m.28), Archibald (m.36) y Flis (m.36).

Incidencias: Final de la Copa FIBA, disputada en el Palats Sportu de Kiev ante 1.500 aficionados.

El DKV Joventut se situó de nuevo en la elite continental con la conquista en Kiev de la Copa FIBA tras imponerse en la final al Khimki ruso y alzarse con un título que releva a la Liga Europea de 1994.

El equipo de Badalona dejó claro en Ucrania que el baloncesto ACB está muy por encima del que se practica en el este de Europa, con la excepción que encarna el CSKA Moscú.

El DKV Joventut está de nuevo entre los campeones europeos, aunque sea de la que unos consideran por calidad la tercera competición continental y otros, como la segunda. En cualquier caso, el club catalán quería reencontrarse con esa sensación de alzar un título de este tipo y dejó al Khimki sin opción alguna de principio a fin.

El conjunto badalonés descubrió muy rápido que el cuadro ruso le iba a dar las mismas facilidades que el Kiev en la semifinal del viernes.

El equipo de Aíto García Reneses empezó algo frío (9-2), pero encadenó un parcial de 0-9 que ya le dio la inicitiva para siempre.