0- OLYMPIQUE LYON: Lloris; Dabo, Cris, Lovren (Koné, min. 37), Réveillère; Kallstrom, Gonalons; Ederson (Belfodil, min. 83), Gourcuff, Briand; y Gomis (Lacazette, min. 74).

2- REAL MADRID: Casillas; Lass Diarra, Pepe, Ramos, Coentrao (Albiol, min. 62); Khedira, Alonso; Di María (Callejón, min. 83), zil, Cristiano Ronaldo; y Benzema (Higuaín, min. 70).

GOLES: 0-1, min. 23: Ronaldo; 0-2, min.67: Ronaldo, de penalti.

ÁRBITRO: Nicola Rizzoli (ITA). Mostró cartulina amarilla a Cris (min. 7), Khedira (min. 50), Kallstrom (min. 56), L. Diarra (min. 58), Albiol (min. 74) e Higuaín (min. 76).

Acabó el Real Madrid con la maldición que le perseguía en sus visitas al estadio de Gerland al superar anoche por primera vez al Olympique de Lyon (0-2) en su feudo gracias a la puntería de Cristiano Ronaldo, autor de los dos goles. Un doblete que clasifica matemáticamente al conjunto blanco para los octavos de final de la Liga de Campeones. Si bien, la primera plaza de grupo todavía sigue en juego debido a la victoria del Ajax ante el Dinamo de Zagreb.

El conjunto de Jose Mourinho no tuvo que realizar un gran partido para rubricar la abultada diferencia de calidad que hoy en día le separa con el Lyon, ahora condenado a ganar prácticamente sus próximos partidos para meterse en la siguiente fase.

La única sorpresa en el once inicial del técnico portugués fue la entrada de Lass para cubrir la baja de Arbeloa. Una manera de confirmar a Sergio Ramos como central, en detrimento de Varane o Albiol.

Salió el Lyon con la intención de presionar alto para incomodar a los centrocampistas blancos. Quería el equipo francés dar una mejor imagen que en el Santiago Bernabéu, en donde se les tachó de cobardes por encerrarse atrás desde el inicio.

Sin embargo poco les duró el planteamiento a los pupilos de Remi Garde. No hay nada más peligroso que adelantar las líneas y dejar espacios para jugadores como Benzema y Cristiano Ronaldo, que cuentan con zil como suministrador de asistencias de lujo.

A los siete minutos forzó la tarjeta amarilla a Cris, al llegar este tarde y derribarle sin balón. Y dos minutos después la pesadilla del Olympique conectó con Benzema, pero el francés no pudo batir a Lloris que se lució con una gran parada. El germano de origen turco se lució poco después con dos caños consecutivos a Réveillère y Cris. El central brasileño se jugó entonces la roja, al volver a derribarlo.

ZIL, MUCHO MEJOR

Con zil desatado, Benzema y Cristiano Ronaldo haciendo malabarismos con el balón y Xavi Alonso moviendo con inteligencia al equipo, no iba a tardar en llegar el gol. A los 23 minutos una bonita combinación en la frontal del área finalizó con Benzema por los suelos, derribado por Gourcuff. Una falta directa que Cristiano se encargó en transformar, aprovechando el hueco que dejó en la barrera Khedira.

El partido solo tenía color blanco. El Olympique se había vuelto a encerrar en su área pero porque no le quedaba otra opción ante el vendaval de juego madridista. Hasta recién pasada la media hora el equipo francés no pudo sacudirse el dominio al que se veía sometido.

Briand dio el primer aviso del peligro lionés después de un control con la mano en el área que no pitó el árbitro, y Gourcuff poco después dejó claro que un descuido de la defensa merengue se podría pagar muy caro adentrarse como un tiro en el área y obligar a Casillas a realizar una gran parada.

En la reanudación el Lyon se lanzó a por todas. Hasta dos penaltis reclamaron en los primeros minutos por sendas caídas en el área de Ederson y Gomis. El primer remate también fue del equipo francés. Un cabezazo de Koné que detuvo sin problemas Casillas. El Madrid había perdido el control del partido. Si se libró del empate fue por la poca pericia de su rival. El Olympique también se topó con un Casillas muy seguro.

El gol de la tranquilidad llegó en una rápida combinación también en la frontal del área con Ozil a la batuta. El balón le llegó a Cristiano y éste tras regatear a Lloris se enganchó con Dabo. El árbitro señaló penalti y el portugués no perdonó. El Madrid está en octavos. Ahora luchará por ser primero.