E l lanzador extremeño Javier Cienfuegos lo ha vuelto a hacer. En el mitin de Andújar, celebrado en la tarde-noche de ayer, el montijano consiguió batir su propio récord de España de lanzamiento de martillo, situándolo muy cerca de la barrera psicológica de los 80 metros, meta que puede tener a su alcance por su excepcional estado de forma. Cienfuegos lanzó el martillo a una distancia de 79,38 metros después de protagonizar el mejor concurso de su vida: 74,48; 76,60; 77,52; 77,57; 78,10 y 79,38 en el sexto tiro. Tremendo.

Con ello pulveriza su propio registro, que consiguió en el Campeonato de España, en La Nucía (Alicante) la pasada semana y que había situado en 78,70 después de haber hecho otra mejor marca nacional anterior en León. El extremeño ha vuelto a sorprender a todos con este récord, que le sitúa en condiciones de hacer un gran Mundial en Doha a principios de octubre.

«Decían que era un visionario, que no podía ser». Antonio Fuentes, su entrenador, se mostraba feliz «por el trabajo bien hecho» y volvía a casa desde Andújar recordando sus declaraciones a este diario en las que vaticinaba que Cienfuegos podía llegar a los 80 metros. No lo ha hecho todavía, pero ya pocos dudan que las fuerzas y el talento los tiene.

Un eufórico Cienfuegos aseguró tras la prueba que el objetivo en los Mundiales de Doha es «luchar por las medallas» al admitir encontrarse en el mejor momento de su carrera deportiva.

El lanzador de Montijo destacó en las redes sociales de la Federación Española de Atletismo que el «trabajo realizado en los últimos seis años ha dado un excelente resultado, porque no es fácil batir el récord de España en cuatro ocasiones en un año», informa Efe.

Cienfuegos tiene la tercera mejor marca del mundo y no oculta que su reto es luchar por las medallas en Doha. «Iremos al Mundial con una gran ilusión y con la meta de subir al podio. Sería el mejor colofón a una temporada con grandes marcas», dijo.