ATLETIC CLUB: Iraizoz; Iraola, San José, Amorebieta, Koikili; Gurpegui, Orbaiz (Susaeta, min.65), Javi Martínez, Yeste (David López, min.74); Toquero (De Marcos, min.85) y Llorente.

REAL MADRID: Casillas; Sergio Ramos, Garay, Albiol, Arbeloa; Lass (Granero, min.72), Xabi Alonso, Marcelo (Guti, min.60); Kaká, Cristiano Ronaldo y Benzema (Raúl, min.77).

GOL: 1-0, min.2: Llorente.

ARBITRO: González Vázquez (Colegio gallego). Expulsó a Gurpegui, por dos tarjetas amarillas (m.95). Amonestó a Javi Martínez, Koikili, Iraizoz, Lass, Sergio Ramos, Xabi Alonso y Ronaldo.

Una gran actuación de Iraizoz y el acierto de Fernando Llorente hicieron anoche sucumbir al Real Madrid en San Mames en un partido pleno de intensidad y a calzón quitado por parte de los dos equipos del primer al último minuto.

El ariete abrió el marcador como el Athletic deseaba, pronto y en una jugada de estrategia. Y fue el que mantuvo las esperanzas ofensivas de un equipo totalmente volcado en mantener la ventaja conseguida, labor en la que todos sus compañeros estuvieron ejemplares, casi épicos.

Lo del portero fue punto y aparte. Probablemente Iraizoz se haya ganado de manera definitiva la confianza y el cariño de San Mamés, donde primero frenó a Karin Benzema y después a un Cristiano Ronaldo que tiene aún pendiente saber qué es un partido en La Catedral. Su castigo fue una tarjeta amarilla.

CRISTIANO, INSISTENTE Pero al portugués nadie puede decirle que, en lo futbolístico, no diese la cara. Se hartó de chutar y chutar, pero el meta local estaba tocado por los dioses. También insistió lo suyo Benzema, pero con el mismo resultado.

Así, el Madrid ve como el liderato se aleja un poco más y el Athletic no solo disfruta de una victoria que llevaba un lustro esperando, sino que además se ilusiona con los puestos europeos.

El partido comenzó a mil por hora, la velocidad a la que le puso Llorente con su carrera al primer balón largo de su equipo. De él se derivaron los dos primeros minutos de juego pletóricos del Athletic y nefastos para el Madrid.

En 120 segundos, el equipo local disparó dos veces al poste --Gurpegui y Toquero-- y tres veces con opciones de marcar en la misma jugada (otra de Gurpegui), y provocó dos saques de esquina. El segundo dio lugar al primer gol. Lass no logró despejar el saque de Yeste en el primer palo, el balón fue al segundo y allí Llorente remachó.

Casi no había empezado el partido y el Madrid casi tenía que dar gracias por ir solo un gol abajo. Pero la actitud de sus jugadores, casi todos en el centro del campo queriendo sacar con la piña del Athletic aún celebrando, avanzaba pelea más que dura para los locales.

Y así fue. Más intentando exquisiteces que con un fútbol exquisito, el conjunto blanco comenzó a carburar y poner cerco a la meta de Iraizoz, que aguantó como los mejores el bombardeo que le cayó durante la primera mitad.

Comenzó menos vibrante la segunda mitad, en la que se repitió un tanto el guión. La primera jugada peligrosa fue otra vez del Athletic, y de nuevo de Llorente que, si llega a rubricar con un segundo gol el giro que se dio en el área y el posterior regate ante tres rivales, hubiese estado durante la semana en boca de todos.

Después llegó otro bombardeo blanco, esta vez con el desquiciado Cristiano como relevo de Benzema. Hasta en tres ocasiones le buscó el portugués las cosquillas a Iraizoz, que mantuvo la firmeza de antes del descanso.

Aunque la ocasión más clara la tuvo Kaká, al que en el minuto 72 se le fue de manera increíble arriba un buen pase de Cristiano ya dentro del área. En el tramo final, Kaká tuvo otra y Raúl la suya. Y Llorente, al que pudieron haberle hecho un penalti, pudo poner el 2-0. Todo antes de una última, y antológica, parada de Iraizoz, de nuevo a Cristiano.