Visto al magnífico espectáculo y el gran resultado logrado ante Italia, Marco van Basten repetirá (20.45 / Cuatro) el mismo equipo frente a Francia para buscar su pase a los cuartos de final, mientras que Domenech busca la reacción de los ´bleus´, cambiará de sistema y pondrá al barcelonista Thierry Henry en punta.

La única novedad que Holanda podría presentar es el retorno de Arjen Robben, que parece totalmente recuperado del problema muscular sufrido en la víspera del encuentro ante Italia.

Los que se la juegan son los franceses. El pésimo juego mostrado ante Rumanía en el primer partido (0-0) encendió las alarmas y Raymond Domenech parece dispuesto a revolucionar su equipo, cambiar de hombres y de sistema, para sacar adelante el encuentro.

El seleccionador francés había anunciado cambios en cuatro posiciones y todo indica que así lo hará, pero es que también variará su sistema y pondrá en juego un esquema muy parecido al de Van Basten, un 4-2-3-1, con Henry, el máximo goleador de la historia de los ´bleus´ en punta.

Asimismo, Italia se juega (18.00 / Canal +), contra Rumanía en Zúrich, su supervivencia en la Eurocopa, pero no sólo eso, también el orgullo de un grupo de jugadores, campeones del mundo, que se sienten maltratados por la crítica tras la goleada frente a Holanda (0-3).

La selección italiana siente añoranza de Fabio Cannavaro. El defensa del Real Madrid simboliza todo lo que perdió el equipo de Roberto Donadoni ante los holandeses; el espíritu de sacrificio colectivo y la seguridad defensiva. El otro frente abierto viene de la crítica, que considera presuntuoso el estilo de juego que trata de imponer Roberto Donadoni. El fútbol italiano tiene un esquema muy claro; defensa-contragolpe y 1-0. Salirse de ahí causa alarma.

Entre tanto revuelo espera pescar Rumanía. Acuden motivados a la cita. A Cristian Chivu no le ha importado jugar en el Inter, ha prometido "un infierno" a sus rivales, y Marica jugará pese a que se le ha recomendado reposo por un golpe.